Icono del sitio Trabajadores

16 de agosto: nombres, récord y show

Dos de los grandes de estos juegos: Usain Bolt y Michael Phelps.
Dos de los grandes de estos juegos: Usain Bolt y Michael Phelps.

 

Río de Janeiro.- Repasemos rápidamente estos nombres: Michael Phelps, Usain Bolt, Simone Biles, Katie Ledecky, Katinka Hosszu, Jason Kenny, Wayde Van Niekerk, Mijaín López, Kaori Icho y Teddy Rinner. ¿Les resultan conocidos? ¿Los vieron ganar ahora en Río de Janeiro? ¿Qué tienen en común?

Todos ellos, dentro de una lista que pudiera extenderse a más de 20 nombres, además de ser campeones olímpicos en esta cita del 2016 han marcado récords e historia en sus respectivos deportes y son de las figuras mediáticas más buscadas en una cita con 24 nuevas marcas universales y 66 olímpicas. ¿Casi nada, verdad?

De Phelps hay que hablar en primer término lo que representó volver después de haber caído en el alcohol y en las drogas. Otra vez fue noticia y sus cinco oros y una plata elevaron a la inmortalidad sus 23 preseas doradas en cinco participaciones, algo que hoy parece impensable superar.

Al jamaicano Bolt las cámaras y la afición no puede mimarlo más. Es el verdadero rey que hace su show no para vender coronas sino para que lo amen más. Ya es historia con triplete en el hectómetro, pero todavía le quedan más funciones para abarrotar el estadio Joa Havelange: los 200 y el relevo 4×100. Su flecha lanzada no es solo para una foto conocida, atraviesa a europeos, asiáticos, africanos, australianos y americanos.

Si de perfección se trata, la gimnasta estadounidense Simon Biles, de solo 19 años, lo concretó con belleza, acrobacia y una sonrisa cautivadora. Emuló a las grandes, la soviética Larissa Latynina, la checa Vera Caslavska, y a las rumanas Nadia Comanecci y Ecaterina Szabo, pero su récord mayor fue imantar, conjugar y amar la técnica con impecable belleza.

Katie Ledecky y Katinka Hosszu sacaron de las piscinas un trio de doradas y par de plusmarcas. En el caso de la estadounidense su inspiración mayor radica en la propia historia de la natación de su país, en tanto la húngara nada más rápido que nadie los cuatro estilos y si sumamos la belleza natural bien ganado tienen el sobrenombre de “la mujer sirena de los Juegos”.

Para el ciclista británico Jason Kenny los límites sobre una bicicleta parecen ser infinitos y de una edición a otra disminuye los tiempos en la velocidad, cual motor de bicicleta en sus piernas. Su pareja Laura Trott lo complementa cada vez mejor y ahora es una de las parejas más exitosas (de las 66 que han competido en Juegos Olímpicos) con nada menos que diez oros entre ambos desde su estreno en estas lides.

Si un récord puede considerarse el más grande de todos los impuestos en Río de Janeiro, la mayoría coincide en hablar de los 43.03 segundos en los 400 metros del sudafricano de 24 años Van Niekerk. Su anterior recordista y actual comentarista en esta lid, Michael Johnson (43.18 en 1999) avizoró antes del disparo un 43.10 y al ver la marca final solo pudo exclamar: “simplemente increíble”.

Un deporte que solo logró repletar la Arena Carioca 2 en par de ocasiones (hasta el momento) ha sido la lucha. Y en ambos casos por dos leyendas: nuestro Mijaín López y la japonesa Kaori Icho, quienes ganaron su tercer y cuarto oro, respectivamente. Tanta historia en estos gladiadores equivale a más de 12 años en la élite de la disciplina y eso equivale a un sacrificio pocas veces valorado en su real dimensión.

Finalmente y no por último menos importante o único ejemplo, el judoca Teddy Rinner es para la delegación francesa un “Benzema” de ippones, ídolo de multitudes no solo sobre el tatami. Su segunda corona olímpica consecutiva solo ilumina una grandeza que lo ha convertido en uno de los cinco deportistas europeos más prestigiosos y populares, según la última encuesta de Eurosport.

De todo esto, nombres, récord y shows también cuenta este diario.

Compartir...
Salir de la versión móvil