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Out 27: De rojo y amarillo el primer juego de la semifinal

Con un hit de oro en el noveno inning de Dariel Duque que sirvió para impulsar a Erisbel Arruebaruena desde la intermedia, los Cocodrilos de Matanzas rompieron el abrazo en la pizarra y se impusieron 5-4 a los Gallos de Sancti Spíritus, en el primer partido de la semifinal de la 61 Serie Nacional de Béisbol, jugado en el estadio José Antonio Huelga, en la capital espirituana.

Los Cocodrilos de Matanzas festejaron la primera victoria en semifinal. foto: tomada del Escambray.cu

Los uniformados de rojo y amarillo fueron remontando a cuenta gotas el marcador, pues los discípulos de Eriel Sánchez salieron delante en el segundo capítulo con par de anotaciones, tras haber pisado el home cada conjunto una vez en la entrada de apertura. En el cuarto, Frederich Cepeda impulsó con fly de sacrificio la cuarta de los anfitriones y todo era fiesta para el numeroso público que se dio cita.

Los abridores Yuen Socarrás y Dariel Góngora sortearon el vendaval de indiscutibles, con el mejor provecho para el primero, pues dejó el box en el séptimo ganando su equipo, lo cual solo tenía que preservar Yankiel Mauri en el último tercio. Pero la rebelión de los yumurinos de Armando Ferrer estaba por fraguar.

Tras descontar una en el quinto por metrallazo del propio Arruebaruena, el llamado inning de la suerte reservó otra rayita más gracias al pelotazo propinado a Yariel Duque con las bases llenas. Un sencillo remolcador de Ariel Sánchez igualó el pleito a cuatro y todo quedó listo para el noveno, cuando Duque pegó el hit de oro frente al relevista Ariel Zerquera.

Con el match 1-0, Matanzas buscará este viernes el segundo triunfo con Yamichel Pérez en la lomita, mientras Sancti Spíritus debe enviar a la igualada al derecho José Eduardo Santos. En esa propia jornada, en Bayamo, comenzará la otra semifinal entre Granma y Ciego de Ávila con duelo pactado entre César García y Yander Guevara.

Moralejas del partido

– La defensa yumurina, en especial, la de Yadil Mujica, falló en par de ocasiones y costó par de carreras; sin embargo, en el octavo, el torpedero Arruebaruena se acordó que es uno de los mejores en esta posición del país para fabricar un doble play salvador.

– Matanzas había perdido 13 juegos por una carrera en la ronda clasificatoria, sin embargo, abrió la semifinal con una sonrisa por esta diferencia. ¿Habrán aprendido a ganar ya por la mínima?

– El mentor espirituano no dudó en ningún momento en sacar a sus mejores cartas de pitcheo para llevarse el éxito, pero ni Mauri ni Zerquera se hicieron justicia este jueves. Perder con su principal carta de éxito no es para nada agradable y en temas de probabilidades resta bastante en pos de llegar a la final.

– Mendoza fletó la primera y Cepeda la cuarta, pero dirección y seguidores del equipo saben que sobre ellos recae la mayor responsabilidad de avanzar a una final por segunda ocasión en este siglo XXI.

– Quizás Dariel Góngora no debió abrir el octavo. Una vez más se espera para traer al relevista (en este caso fue Noelvis Entenza) una acumulación de corredores que pudieron evitarse. Mucho hay que insistir de que el abridor en el beisbol moderno raramente pasa del séptimo capítulo.

– Las lluvias impidieron entrenar al equipo Matanzas como necesitaban para esta semifinal, sin embargo, buscaron variantes y su alineación, liderada por el capitán Arruebaruena, estuvo suelta y no paró hasta imponerse en el partido.

 

 

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