No avisó previamente. Tampoco había señales ni movimiento que delatara su posible visita. La rutina de ese 21 de septiembre de 1990 en el periódico Trabajadores era la de siempre. Incluso buena parte del colectivo se fue temprano porque las páginas estaban terminadas. Solo quedaban alrededor de 15 personas cuando Fidel llegó pasadas las… Continuar leyendo



(23 puntos, 5 votos)