La temporada de fin de año del Ballet Nacional de Cuba (BNC) vuelve a situar al gran repertorio clásico en el centro de la escena con Don Quijote, título imprescindible por su vitalidad, colorido y exigencia técnica. En la sala Avellaneda del Teatro Nacional, la compañía dirigida por Viengsay Valdés ha desplegado un programa que confirma la solidez del conjunto y la feliz confluencia de figuras consagradas y jóvenes intérpretes, en funciones que se extienden hasta el 30 de diciembre y el 1.º de enero, que reafirma a este ballet como una auténtica fiesta para el público habanero.

Uno de los grandes acontecimientos de esta temporada es la presencia de Marianela Núñez, estrella del Royal Ballet de Londres, quien interpreta a Kitri los días 28 y 30 de diciembre, en lo que ha calificado como un regreso celebrado por un público que ama profundamente la danza. La bailarina argentina ha expresado su entusiasmo por compartir escena con el BNC y por reencontrarse con una audiencia apasionada, en una versión que subraya la tradición de excelencia de la escuela cubana y eleva aún más el cierre del año danzario en La Habana.

