¿Cómo aceptar las diferencias y ponderar las capacidades profesionales en el ámbito laboral? ¿Con qué herramientas cuentan los dirigentes sindicales para representar a sus afiliados frente a las administraciones? ¿La inclusión y el respeto son premisas en el movimiento obrero, si tenemos en cuenta discapacidades físicas o mentales?
Temas de esa índole marcaron dos días de capacitación en la Central de Trabajadores de Cuba, en Artemisa, con la maestría del asesor internacional Hans Kristian Stenestø y la sensibilidad de Magnus Langstrand, asesor especial experto en Negociaciones de Noruega.
Este último, por primera vez en Cuba, reconoció en los ejercicios prácticos la capacidad de negociar de los presentes en la pasantía, pues, se expusieron decretos leyes y otros apartados legales que reconocen derechos y deberes de la masa trabajadora.
Con el apoyo de la joven traductora Lina Álvarez Reyes, los dirigentes de la estructura provincial y otros de secciones sindicales que recibieron asesoría, tuvieron la posibilidad de cuestionar procederes y ejemplificar leyes que amparan a las personas trabajadoras en Cuba.
El intercambio de los sindicalistas noruegos se desarrolla por cuarta ocasión en el país. Este año ya lo realizaron en la provincia de Pinar del Río, siempre como parte de la colaboración internacional a través del proyecto FAGFORBUNDET, explicó Saily Alonso Gutiérrez, miembro del secretariado nacional del Sindicato de la Administración Pública, para atender asuntos laborales y sociales.
También fue parte del intercambio el nuevo Código de Trabajo, llevado a consulta por estos días para su posterior aprobación, teniendo en cuenta la protección de trabajadores estatales y no estatales con iguales posibilidades de representación.
Este evento fortalece los lazos entre las instituciones de ambos países, debido a la retroalimentación de los participantes, aseguró Hans Kristian Stenestø.
“Profundizamos en estrategias de gestión pública, capacitación en derechos laborales y procesos administrativos. Aún existen brechas que exigen una constante y sistemática preparación de todos los dirigentes sindicales”, explicó.