Como ha sido habitual en otras ocasiones, la brigada Ignacio Agramonte integrada por unos 60 trabajadores eléctricos de la provincia de Camagüey, desde este miércoles partió hacia Santiago de Cuba y otras regiones del oriente a prestar ayuda solidaria.
Tras la comprobación de que en el territorio agramontino no se reportan hasta el momento grandes afectaciones tras el paso del huracán Melissa, el Contingente camagüeyano se alistó para contribuir en las labores recuperativas en otros lares.
Como precisó Lyan Alonso Alfonso, secretaria del buró provincial del Sindicato Nacional de Trabajadores de Energía y Minas, el grupo está compuesto en su mayoría por linieros, quienes junto a técnicos, chóferes y especialistas de otras áreas, como en otros momentos, parten a brindar su experiencia en la restauración de las redes eléctricas tras el paso de un evento meteorológico como Melissa.
Junto a las brigadas de linieros eléctricos, también están otras del sector de las telecomunicaciones y de Acueducto y Alcantarillado quienes también contribuirán en las labores de recuperación en las provincias orientales.
Camagüey en calma
Como comprobaron las máximas autoridades de la provincia, Melissa no afectó grandemente al territorio, pero al aún existir al norte del territorio fuertes ráfagas de viento, oleaje y algunas precipitaciones se mantiene una vigilancia.
Jorge Enrique Sutil Sarabia, vicepresidente del Consejo de Defensa Provincial, como confirmó a medios locales, igualmente continúan protegidas unas 60 mil personas en centros estatales y casas de amistades a partir de los estudios de peligro, vulnerabilidad y riesgos en la provincia.
Pero como destacó el dirigente, las diferentes estructuras se prepararon desde el sistema de alerta temprana para mitigar el impacto del fenómeno meteorológico.