Icono del sitio Trabajadores

Cuba real: equivocaciones y verdades

La primera sesión de las comisiones de trabajo de la Asamblea Nacional abordó más de diez temas de amplio interés social. Y uno de ellos inundó las redes sociales a partir del alto grado de sensibilidad que despierta siempre: personas vulnerables, que incluyen deambulantes, mendigos, buzos y todo una serie de ciudadanos que hoy vemos en nuestras calles con dolor y necesitan de políticas sociales más activas y resolutivas, pues no estuvimos acostumbrados a convivir con ellos en nuestra sociedad por más de 60 años. Eran casos aislados, que hoy lamentablemente no son.

La Ministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Elena Feijó, intervino en esos debates y se equivocó. Con sinceridad y estremecedores sentimientos hay que decirlo: en Cuba sí hay mendigos hoy, sí han aumentado los deambulantes, los buzos se llaman a quienes revuelven los contenedores de basura y están en tierra y no se trata de disfraces, se trata de ejemplos visibles en La Habana y en muchos otros territorios.

Y la prensa, que hoy anda festejando el cumpleaños 62 de la Unión de Periodistas de Cuba, lo ha abordado en múltiples reportajes, testimonios, comentarios y artículos para llamar la atención gubernamental. En lo específico, el periódico Trabajadores publicó el 8 de abril del 2024 este reportaje: Los rostros del silencio gritan https://www.trabajadores.cu/…/los-rostros-del-silencio…/ en el que fuentes del propio Ministerio de Trabajo, psicólogos y sociológos explican y dan luces sobre el fenómeno, con los matices incluidos que siempre llevan estos asuntos.

Hasta ahí hay una posición clara sobre este doloroso tema. Sin embargo, lo más preocupante no son solo las desafortunadas palabras de la Ministra este 14 de julio, sino que los propios diputados y la Comisión en cuestión no se pronunciara como luego sí lo hicieron muchos cubanos y cubanas en redes sociales y comentarios callejeros, a quienes representan en esta Asamblea.

Soy testigo de la voluntad del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social en darle un vuelco a esta problemática. Nada justifica el error del enfoque de su titular y mucho menos que se generalice o se minimice una situación que debemos revertir entre todos, aunque toque a ese Ministerio el papel rector.

La Cuba real tiene que asumirse con luces y sombras, con matices y verdades aunque duelan. Es la credibilidad del proceso revolucionario lo que está en juego hoy cuando la sociedad está atravesada de muchas carencias y limitaciones económicas. Quedan más temas de la Asamblea. Ojalá la atención de la población siga siendo igual, a pesar de la situación energética y los consabidos apagones. Sería señal de que el Parlamento está más cerca de su gente, aunque los diputados no deben olvidar a Martí y el concepto que nos legó de su función: «el deber de ser útil».

Compartir...
Salir de la versión móvil