Bajo el lema «Valores comunes: la base del crecimiento en un mundo multipolar», la XXVIII edición del Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF por sus siglas en inglés) abrió hoy sus puertas a 20 mil representantes de 140 países y territorios, incluyendo jefes de Estado, ministros, y líderes de organizaciones internacionales, en el moderno recinto Expoforum.

Al finalizar este miércoles, el presidente ruso Vladimir Putin se reunió con medios de comunicaciones internacionales presentes en el foro. En el encuentro subrayó que uno de los principales objetivos de este acontecimiento es intentar buscar soluciones para todos los retos a los cuales se enfrenta el mundo actualmente. Además, reiteró que Rusia aboga por un orden mundial justo y está en contra de todas las guerras comerciales.
«Es probable que ahora no sea necesario entrar en el hecho de que estamos abogando por un orden mundial justo, por el respeto de todas las reglas de la Organización Internacional de Comercio y por que no se modifiquen debido a circunstancias políticas», enfatizó. «Estamos en contra de todo tipo de guerras comerciales, restricciones y demás», agregó.
El evento, que se extenderá hasta el 21 de junio, es el principal escenario de diálogo económico anual de Rusia. Se celebra desde 1997, solo cancelado en el 2020 como consecuencia de la pandemia de la covid-19. Desde el 2006 cuenta con el patrocinio y la participación del presidente ruso Vladimir Putin.
En esta edición la elección del Reino de Baréin como país invitado es símbolo de una orientación hacia nuevas alianzas, sumándose a los 19 diálogos bilaterales programados con potencias emergentes como China, Brasil, Vietnam, Indonesia, Kazajistán, Mongolia y el continente africano.
A pesar de los esfuerzos de occidente de aislar a Rusia, el foro consolida el atractivo y la pujanza de la nación euroasiática. Los organizadores presentaron un programa empresarial intensivo, que incluye más de 150 eventos y unos 600 ponentes y moderadores; entre ellos ministros de Argelia, Catar, Baréin y Brasil, además de autoridades rusas como Antón Siluánov, ministro de Finanzas y Maxin Reshétnikov ministro de Desarrollo Económico.
En el SPIEF se llevarán a cabo debates en cinco ejes temáticos: economía global, economía rusa, desarrollo del capital humano, ecología y tecnologías.
Entre los eventos más importantes, se realizarán los foros de negocios del BRICS, la Organización de Cooperación de Shanghái, la Unión Euroasiática, el Foro Ruso de la Pequeña y Mediana Empresa, el Foro de Industrias Creativas y la Asamblea General de la Organización de Agencias de Noticias de Asia-Pacífico.
Un punto culminante será el Foro Económico Internacional “Día del Futuro”, que reunirá a jóvenes empresarios de más de 100 países, destacando el rol de las nuevas generaciones en la reconfiguración económica mundial.

El acto central del Foro Económico Internacional de San Petersburgo será la sesión plenaria del viernes, cuando el presidente ruso, Vladimir Putin, pronunciará un discurso de apertura.
Países latinoamericanos como Brasil, Venezuela, Honduras, México y Cuba tienen participación en el evento. La mayor de las Antillas está representada por el ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera Oscar Pérez-Oliva Fraga, quién declaró en una entrevista a RT en Español, que Cuba asiste a esta cita desde hace años permite con el fin de actualizarse sobre temas económicos y tecnológicos a nivel internacional.
«Hemos conocido que Rusia proyecta diseñar una estrategia en materia energética hasta el año 2050; nos han invitado a participar, cuestión que acogemos positivamente y que vamos a estudiar para trabajar de conjunto con las autoridades en su desarrollo. Es un tema importante porque entre Cuba y Rusia existe una estrecha cooperación en el ámbito energético que data de muchas décadas», aseveró.
Al quedar inaugurado su vigesimoctava edición, el evento trasciende su rol como vitrina de la economía rusa. Se consolida como núcleo de redes alternativas donde emergen consensos sobre comercio, tecnología y finanzas en un mundo que, más que globalizado, se reconoce como multipolar.
El éxito del SPIEF 2024 demostró la gran importancia de esta plataforma pues estuvieron presentes 21 mil 800 personas de 139 países y territorios, y se firmaron mil 73 acuerdos equivalentes a más de 6,4 billones de rublos.

