Me atrevo a tomar prestada una de las estrofas de la popular canción “Solo el amor”, de Silvio Rodríguez para homenajear a quienes con amor y cariño luchan cada día por un futuro mejor. Con casi dos años de fundada, la Asociación Cubana de Personas en Situación de Discapacidad Intelectual (ACPDI) continúa sumando nuevos retos, asociados y oportunidades que promueven el desarrollo inclusivo de este grupo de personas a la sociedad.

Transcurrieron 15 años de lucha para materializar su aspiración, y el 8 de junio de 2023 al fin vio la luz. Varias son las organizaciones políticas e instituciones gubernamentales que contribuyen con su esfuerzo al crecimiento de la asociación entre las que se destacan los ministerios de Salud pública (Minsap), y el de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) respectivamente; el Instituto Nacional de Deportes y Recreación (Inder); la Casa del Conservador de la ciudad, entre otros.
Largo ha sido el camino, “hemos tenido barreras y muchos No, pero no se detuvo y gracias al apoyo desde sus inicios, de un grupo personas, siguieron adelante. Hoy “estamos agradecidos de todos, hasta de esos NO, que nos hicieron más fuertes e incitaron a prepararnos más, a no rendirnos”, aseguró Mayelín Oliva Rodríguez, presidenta de la ACPDI nacional.

A pesar de las difíciles circunstancias por las que atraviesa el país, la ACPDI ha logrado superar los obstáculos mediante la unidad de su colectivo, pero no todo ha sido color de rosa. La falta de un local propio para las filiales provinciales en el que puedan realizar el correcto ejercicio de sus funciones, la no disponibilidad de transporte, así como el no completamiento de su estructura orgánica continúan siendo algunas de las principales deficiencias que debatieron este martes los padres, madres y abuelos cuidadores durante el balance anual de la asociación.
Yaniris Hernández Vento, viceministra primera del MTSS resaltó el arduo trabajo ejecutado hasta el momento y los exhortó a continuar creando buenos ejemplos que sean referentes para otras familias.
«Este espacio es el escenario propicio para compartir las buenas prácticas e intercambiar experiencias. Asimismo, abundó acerca de la entrega de equipos cómputos y materiales de oficina para lograr continuar con la tarea.“Estamos con ustedes en cada una de las batallas y no vamos a claudicar».
El encuentro estuvo presidido por Mayelín Oliva Rodríguez, presidenta de la ACPDI nacional; Yusmila Hernández Castillo, vicepresidenta de funcionamiento orgánico de la ACPDI nacional; Edenys Izquierdo Molina, vicepresidenta de inclusión en la vida social y económica de la ACPDI nacional; Lic. Susser Lara Licea, vicepresidenta de inclusión en la vida comunitaria de la ACPDI nacional y Yohania Mateu Reina, vicepresidenta Comunitaria e información de la ACPDI nacional.

Además, asistieron representantes de varios ministerios; así como familiares y miembros de la ANCI, la ACLIFIN y la ANSOC.
En la jornada fueron entregados los carnés a los nuevos asociados, y a su vez el sentido reconocimiento para aquellas organizaciones, ministerios e instituciones que diariamente apoyan el trabajo.
La ACPDI, un sueño cumplido
Entre sus fines está la rehabilitación comunitaria, impulsar el acceso al empleo y a las nuevas tecnologías tanto de las personas en situación de discapacidad intelectual como de sus familiares. De igual modo, participa y contribuye, junto a las autoridades en la creación e implementación de mecanismos, programas y proyectos para garantizar el ejercicio de los derechos de estas personas.

Según Edenys Izquierdo Molina, quien funge como vicepresidenta y es madre de un niño con discapacidad intelectual, ha logrado desde su cargo atender y acompañar a estas personas que en ocasiones son excluidos por la sociedad, cuando arriban a la mayoría de edad. Por eso “nuestra meta es la creación de los centros de desarrollo de habilidades y de cuidado de conjunto con los órganos centrales del Estado, un hecho que beneficia todas las familias cubanas”, reafirmó.
El fin “pudieran tener un lugar donde fueran orientados por especialistas, un espacio de aprendizaje, socialización, recreación y también de intercambio de experiencias entre ellos, para sentirse acompañados”, dijo.
Pero, ¿cuánto falta por hacer? Aún existen limitaciones que impiden llevar esta bella tarea a todos los rincones del país. De este modo, solo se han instaurado ocho filiales provinciales (Sancti Spíritus, Villa Clara, Holguín, La Habana, Cienfuegos, Santiago de Cuba, Artemisa y Granma).
Roberto Eugenio Collazo Manso, vicepresidente de inclusión en la vida social y económica de la ACPDI en Granma, resaltó que a pesar de que existe toda la disposición para cumplir con esta tarea, no cuentan con un local para implementarla. Héroes silenciosos que “solo con el amor y el respeto” hacen maravilla, pues para ellos lo importante no radica en las grandes cosas, sino en que cada quien desde su posición haga lo que tenga que hacer”, a pesar de las dificultades. “Estamos tejiendo un futuro de vida mejor para nuestros hijos y nietos, declaró.
No tenemos un transporte, y eso obstaculiza la tarea, lamenta Lídice Tomé Sánchez, miembro del comité ejecutivo y presidenta de la ACPDI en Villa Clara. Un punto importante para el trabajo pues llegar a todos es el objetivo, pero cómo hacerlo si nos falta el motor, y aunque hemos logrado extendernos hasta los municipios, hay poblados de difícil acceso en el que no puedes entrar caminando, señaló.

El fortalecimiento orgánico de la organización en los municipios constituye un lastre a superar. “Solo nosotros mismos para dirigir y coordinar una mejor labor para potenciar la plena inclusión social nuestros hijos”, acotó Yohania Mateu Reina, vicepresidenta Comunitaria e información de la ACPDI nacional.
No obstante, para la Asociación Cubana de Personas en Situación de Discapacidad Intelectual el 2024 es una victoria. Durante el período se ha trabajado de modo prioritario en la implementación de todos los procesos de organización y dirección con el fin de establecer las normas, procedimientos y directivas que permitan el mejor desarrollo de los fines y objetivos, profundizó Mayelín Oliva, presidenta de la ACPDI nacional.
Todo el mundo cuenta
Para Leydis Montano Pérez, “yo puedo, yo quiero, yo soy capaz” es un impulso para avanzar y no rendirse. “Soy madre de un adolescente con discapacidad intelectual y la vez presidente de la organización.

“El secreto es el amor, la voluntad y la responsabilidad” pilares fundamentales que impulsan la calidad de vida de estos individuos. “Nada queda a la deriva, estamos para y por todos”.
Leydis, al igual que otras mujeres ha dado el paso al frente y hoy lidera la filial granmense, un ejemplo que demuestra el empoderamiento femenino ante el cumplimento de grandes tareas. “Nosotros hemos implementado el uso de las tecnologías dentro de la asociación” para lograr ampliar el círculo de acción y brindar el acompañamiento que requieren las familias en todos los momentos. “Nadie está solo”, puntualizó.
La asociación, añadió, realiza actividades culturales, recreativas y deportivas de conjunto con las demás entidades y además, están
desarrollando el proyecto piloto Prisma de luz, en colaboración con el Reino Unido. La idea impulsa la estimulación sensorial y el bienestar del cuidador a partir de terapias ocupacionales y sobre todo ejercicios de relajación, de respiración y charlas educativas.
“Esto es un sueño hecho realidad”. Su niño Daniel Ernesto es un joven con discapacidad intelectual y autismo, pero ella vio en esta asociación la oportunidad idónea para descubrir sus cualidades profesionales y asegurar un desarrollo y evolución acordes para él. “Es un reto en el que prima el afecto”.
Por un 2025 más fortalecidos
Esta nueva etapa promueve el funcionamiento de la organización mediante la correcta ejecución de los procedimientos y reglamentos del organismo, así como fortalecer el trabajo de las organizaciones de base y la trasformación digital de sus estructuras.
La unidad, el cariño y el compromiso de estas personas apoya la integración de quienes también forman parte de esta sociedad, pero no desde palabras sino con hecho concretos que día a día van construyendo un camino de amor.

