Impresionante huella en la poligrafía

Con labor sobresaliente en lo que va de año, los 960 trabajadores de la Empresa Ediciones Caribe, festejan este 2 de agosto el Día del Trabajador Gráfico cubano, en homenaje al na­cimiento en igual fecha de 1894 del destacado líder sindical Alfredo Ló­pez Arencibia, asesinado en 1926 por el gobierno de turno en el país.

En lucha frontal contra las di­ficultades, su empeño hoy es hacer realidad el lema que guía su diario quehacer: una impresionante hue­lla en la poligrafía. Entre sus armas destacan la potencialidad y el cono­cimiento de las artes gráficas, sin olvidar la necesidad de aumentar la utilización de su amplia capacidad tecnológica.

“Somos una entidad que ha ve­nido levantándose, y aunque aún no cumplimos todos los indicadores planificados, no tenemos pérdidas económicas tras el reordenamiento, a la vez que cumplimos nuestro en­cargo estatal”, aseguró José Gabriel López, director general.

A pesar del precedente inmedia­to de la pandemia y la creciente su­bida de los precios del papel, los tra­bajadores de Ediciones Caribe están convencidos de que los resultados hasta hoy podrían ser superiores. “Ha habido un positivo respaldo a la palabra empeñada, pero hemos es­tado muy limitados. Nos afectan las importaciones de papel y cartulina, tanto por su encarecimiento como por la tardanza en su llegada”, reite­ra el directivo.

No obstante han logrado que el salario medio de quienes allí labo­ran se haya incrementado de 3 mil a 5 mil pesos mensuales. “Ello sin contar los aumentos que posibilita­rán los nuevos sistemas de pago por los resultados y las utilidades que podrán repartir entre sus trabaja­dores. Asimismo, las utilidades nos han permitido un nivel financiero para edificar viviendas y para cur­sos de capacitación”, nos dijo.

Joel Rodríguez Ramos, direc­tor de logística, producción y ven­tas en Ediciones Caribe, pertene­ciente al Ministerio de Industrias, precisa que al concluir el primer semestre de este año la entidad no cumplió el indicador ventas. “Llegamos al 94 %, aunque dadas las limitaciones de importaciones creemos que no es un nivel bajo”, subrayó.

“Al analizar en detalles el que­hacer de este año, podemos signi­ficar tres indicadores, que sin ser del llamado encargo estatal, sí pu­dimos cumplimentarlos en unida­des físicas: son la fabricación de revistas, libros y folletos, así como de envases y embalajes.

Los niveles planificados de li­bretas este año son superiores a los del 2022, y su producción está encargada a las UEB de Palma So­riano y de Guantánamo, mientras los cuadernos y libros de texto se fabrican en las dos antes señaladas y en Santiago de Cuba.

Al respecto el director de lo­gística, producción y ventas des­taca que “aunque estaba previsto, no tuvimos financiamiento para la fabricación. Nos habíamos pro­puesto en el plan de la economía 5,7 millones de unidades en este primer semestre y solo fabricamos 2,9 millones. Centralmente estaba previsto ese financiamiento, pero no nos llegó y creemos que muy di­fícilmente lo tengamos para cubrir nuestras previsiones hasta el fin año”.

Ediciones Caribe es la encar­gada de la fabricación de estuches para tabacos y para medicamen­tos, así como de sellos, etiquetas, cintillos y otras habilitaciones para el tabaco, algo en lo que es de destacar al colectivo de Litográfi­ca Habana.

“El compromiso en el primer semestre era de 209,3 millones de envases y casi logramos los 337 millones. TabaCuba es un cliente muy importante, pues financia las producciones que les hacemos para sus exportaciones. En oca­siones también acompañamos a BioCubaFarma con estuches para medicamentos.

“Además, pudimos satisfacer nuestros compromisos con los títu­los para la Feria del Libro, con la documentación para los procesos eleccionarios desarrollados en el país en el 2022 y este año, así como con la fabricación en tiempo de la libreta de abastecimiento actual”.

UEB Haydée Santamaría, la más destacada

La respuesta fue unánime cuando preguntamos por la UEB más des­tacada entre las 11 que conforman la empresa: “La UEB Haydée San­tamaría, en Palma Soriano. Allí se trabaja con gran creatividad en busca de los mejores resultados en medio de tantas dificultades y tie­nen muy buenos niveles de venta, incluso con puntos para la comer­cialización minorista”, aseveraron los directivos empresariales.