Icono del sitio Trabajadores

Declaración Final del XXII Encuentro Internacional de Partidos Comunistas y Obreros

Solidaridad con Cuba y todos los pueblos que luchan. Unidos somos más fuertes en la lucha antiimperialista, junto con los movimientos sociales y populares, frente al capitalismo y sus políticas, a la amenaza del fascismo y la guerra; en defensa de la paz, el medio ambiente, los derechos de los trabajadores, la solidaridad y el socialismo

Los 145 representantes de 78 Partidos Comunistas y Obreros de­­ 60 países, presentes en este XXII EIPCO, efectuado en La Habana, Cuba, los días 27 y 29 de octubre de 2022, alertan sobre la peligrosa coyuntura en que se encuentra la humanidad.

El actual predominio del imperialismo impone un orden internacional injusto e insostenible, intensifica la explotación y empeora las condiciones de la clase obrera y de los pueblos, genera crecientes conflictos, antagonismos y guerras, y dificulta la solución de problemas globales, como la pandemia de la COVID-19, en la que países socialistas, históricamente, y Cuba hoy, en particular, con su sistema de salud pública y desarrollo científico, han afrontado con eficacia y donde se manifiesta la superioridad del socialismo. Los comunistas defendemos un nuevo orden mundial, basado en la abolición de la explotación del hombre por el hombre, las relaciones de beneficio mutuo entre estados y pueblos, la paz, el desarrollo sostenible para la satisfacción de las necesidades sociales, la justicia social y la solidaridad.

Como consecuencia de la creciente agresividad del imperialismo y de la recomposición geopolítica en curso, enfrentamos una nueva espiral de la carrera armamentista, el reforzamiento y expansión de la OTAN, la aparición de nuevas alianzas militares, la agudización de las tensiones y los conflictos militares, como el de Ucrania, el resurgimiento del fascismo en varias partes del mundo y la “guerra fría” y la amenaza de una conflagración nuclear, que debemos rechazar.

Denunciamos que la depredadora naturaleza del capitalismo conduce al incremento de la desigualdad, la polarización de la riqueza, la exclusión y los flujos migratorios; a la profundización de la crisis alimentaria, y a un agravamiento de la crisis ecológica, mientras nos aproximamos aceleradamente a un punto de “no retorno”.

El sistema político burgués, que defiende los intereses de los monopolios y corporaciones, gestiona la crisis sistémica del capitalismo en su beneficio, intenta controlar, mediante la presión y la violencia, el creciente descontento social de los trabajadores y de los pueblos.

El paulatino declive del poder de los Estados Unidos de América y sus aliados, como resultado de sus crisis internas y frente a sus competidores, ha reforzado el uso indiscriminado de las políticas de bloqueos y medidas coercitivas ilegales, de “doble rasero”, de amenazas e intervenciones militares, y de injerencia en los asuntos internos de los Estados. El imperialismo despliega un vasto arsenal de acciones de subversión en el marco de la guerra no convencional, entre las que sobresalen aquellas de carácter mediático, como herramientas de desestabilización y cambio de gobiernos que no se pliegan a sus intereses.

La batalla de la clase obrera mundial contra el sistema capitalista de explotación requiere, en primer lugar, la unidad del Movimiento Comunista y Obrero junto a los movimientos sociales y populares, campesinos e indígenas, para fortalecer la lucha de clases contra los planes burgueses e imperialistas y por la construcción de un mundo de paz, justicia y equidad social.

Frente a los intentos del imperialismo de contener la lucha de los trabajadores y de los pueblos y socavar la unidad y solidaridad de las fuerzas antimperialistas y revolucionarias, los Partidos Comunistas y Obreros, participantes en el XXII EIPCO en La Habana, acuerdan:

Con el esfuerzo articulado de la vanguardia de la clase obrera, junto a las organizaciones, fuerzas y movimientos sociales y populares, democráticas y por la emancipación de los derechos de las mujeres, seremos capaces de derrotar al capitalismo como sistema mundial dominante, destructivo y sin futuro y lograr una verdadera transformación revolucionaria.

Agradecemos al Partido Comunista de Cuba, a su gobierno revolucionario y a su pueblo, por su contribución en la organización del XXII EIPCO, y por la cálida acogida brindada a sus participantes.

Reafirmamos nuestra solidaridad y apoyo a la justa causa del pueblo cubano y a su lucha por el levantamiento inmediato e incondicional del injusto, criminal y recrudecido bloqueo económico, comercial y financiero, al que ha estado sometido por más de 60 años y exigimos al gobierno estadounidense que saque a Cuba de la espuria lista de países patrocinadores del terrorismo.

Rendimos tributo al legado del líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz, que unido a las enseñanzas del General de Ejército Raúl Castro Ruz y a la generación continuadora, encabezada por el Primer Secretario del CC PCC y Presidente de la República de Cuba Miguel Díaz-Canel Bermúdez, constituyen una inspiración permanente para la lucha de los pueblos por su verdadera y definitiva emancipación, en el camino de la construcción de una sociedad socialista, independiente y solidaria.

¡Unidos en la lucha contra el imperialismo y el capitalismo!

¡Viva el Socialismo!

La Habana, 29 de octubre de 2022

 

 

Compartir...
Salir de la versión móvil