Icono del sitio Trabajadores

Un Palacio de las sombrillas para el béisbol

Bayamo.- Son las 10 de la mañana. El sol quema y él beisbol invita. Cientos de granmenses desfilan rumbo al estadio Mártires de Barbados para apoyar a los Alazanes de Granma en la discusión de la final de la 61 Serie Nacional de Beisbol contra los Cocodrilos de Matanzas. Sin embargo, algo distintivo los acompaña: las imprescindibles sombrillas o paraguas.

Un espectáculo impresionante. Foto José Raúl Rodríguez Robleda

Son imprescindibles para resguardarse del inclemente sol, pues la única grada techada del parque está detrás del home. Las hay multicolores y de los más diversos tipos. Algunas parecen exageradas como si fueran de playa, otras lucen más pequeñas y portan los colores del uniforme granmense: azul, blanco o rojo. Los seguidores de este equipo siempre han venido con ellas y el escenario es único dentro de los parques beisboleros del país.

Al estadio Mártires de Barbados, muchos le comienzan a llamar el Palacio de las sombrillas. Y no les falta razón. El espectáculo es digno de fotos y hasta de asombro, pues las gradas se llenan de este utensilio para la protección del intenso sol o la lluvia y al mismo tiempo todos pueden ver el partido y hasta bailan con ellas al ritmo de la sabrosa conga que anima al equipo.

Es un mosaico impresionante. Los seguidores del conjunto, dirigido por Carlos Martí, usan sus sombrillas para todos. Hacen la tradicional ola que contagia a cada aficionado y la agitan hasta el cielo cuando aparece el jonrón, la carrera o la jugada emocionante. Con ellas demuestran el entusiasmo de la gente de aquí, el calor humano que se vive y la pasión por este deporte que tantas alegrías le ha regalado a este pueblo del oriente cubano.

Niños, mujeres, jóvenes y personas de más edad, seguirán llegando con sus sombrillas hasta el parque Mártires de Barbados. Lo llenarán de colorido y esta cronista volverá a sacar la suya para escribir otras palabras, ahora dedicadas a quienes están debajo de ellas.

EL Palacio de las Sombrillas.Foto José Raúl Rodríguez Robleda
Compartir...
Salir de la versión móvil