Día del Trabajador Marítimo-Portuario: Calitao y la aparente tranquilidad en Carúpano

Día del Trabajador Marítimo-Portuario: Calitao y la aparente tranquilidad en Carúpano

1 Estrella2 Estrellas3 Estrellas4 Estrellas5 Estrellas (5 puntos, 1 votos)
Cargando...

Los trabajadores marítimos portuarios de Cuba ce­lebran su día este 14 de junio en un contexto marcado por el recru­decimiento del bloqueo económico impuesto por los Estados Unidos y la pandemia de la COVID-19, cu­yos impactos desafían el ingenio y la proactividad de sus directivos y colectivos laborales.

 

En la espaciosa rada de Puer­to Carúpano, en Las Tunas, no se percibe el ajetreo habitual de otras épocas de bonanzas, pero la tran­quilidad es aparente. “No hemos perdido el ánimo. La situación es difícil, muy compleja, pero tran­sitoria y nos vamos a recuperar”, asegura el ingeniero Miguel Salas Silva, director de la Empresa de Servicios Portuarios Centro-Este de Cuba.

El directivo refiere que en esa entidad, con unidades empresa­riales de base en las provincias de Ciego de Ávila, Camagüey, Las Tunas y Holguín, en los prime­ros cinco meses del 2020 habían operado 407 mil 215 toneladas de carga general y en ese mismo período del actual año la cifra llega solo a 240 mil 353, el 50 % del plan. La baja producción de azúcar y de barras corrugadas de acero, los dos renglones princi­pales han afectado sobremanera.

Detalla que de enero a mayo del 2021 atendieron 32 buques, 21 menos que en igual etapa del 2020 e inferior en 13 a los previs­tos, “eso sí —confirma—, en to­dos los casos ganamos por pronto despacho, un indicador que de­muestra la eficiencia en el des­empeño”.

 

Alternativas

A pesar de esos contratiempos aún la empresa no ha caído en pérdi­das, afirma el ingeniero José Jesús Abreu Santiesteban, director de Operaciones Comerciales. Y agre­ga: “Esta batalla se gana con efi­ciencia. Si tuviéramos cargas no existirían los problemas que tene­mos hoy. Si hay barco, hay dinero”, subraya, en alusión a los sistemas de pago establecidos y la disposi­ción laboral de los trabajadores.

Para los dos directivos es estra­tégico conservar la fuerza de traba­jo especializada y con ese propósito enfilan acciones, como la producción de alimentos y el apoyo brindado a los puertos del Mariel y La Habana, donde dos de sus brigadas (una de Carúpano y otra de Vita, en Holguín) hicieron labores de carga y descarga con buenos resultados.

 

Un enigma en Puerto Carúpano

Carlos Luis Larrudet Herrera fue testigo de la construcción de la terminal de azúcar a granel Puer­to Carúpano, pero el 20 de enero de 1978, día de su inauguración, no pudo estar y se perdió el acto presidido por el Comandante en Jefe Fidel Castro.

A sus casi 72 años de edad Calitao es ejemplo dentro del sector portuario del país. Foto: Jorge Pérez Cruz
A sus casi 72 años de edad Calitao es ejemplo dentro del sector portuario del país. Foto: Jorge Pérez Cruz

“Pero de ninguna manera estoy insatisfecho”, confirma y cuenta una emocionante anéc­dota: “Me llamaron y pregunté a dónde voy; me dijeron móntese aquí y después le explicamos. En fin, no estuve porque me necesita­ban en otra misión: cuidar al Co­mandante”, enfatiza y su perma­nente entusiasmo se alborota. “Yo era auxiliar de Guardafronteras y volví al puerto cuando el acto se había terminado, pero orgulloso de lo que hice”.

En sus más de 60 años de traba­jo en este enclave Calitao o Papa, como suelen llamarle sus compa­ñeros de faena, entre los miles de sucesos vividos, atesora con espe­cial deferencia ese momento.

Cuando comenzó a funcionar la moderna planta ya Carlos Luis Larrudet Herrera había lleva­do sobre sus hombros quién sabe cuántos sacos de azúcar de 250 li­bras y otros tantos que superaban las 300, pero nunca tuvo el temor de quedarse sin trabajo.

“Confiaba en las declaraciones de Fidel de que iban a humanizar el trabajo de los portuarios y que nadie quedaría sin empleo, y así mismo fue”, asevera. “Y aquí es­toy, trabajando, luchando y dando mi vida por esto”, remarca y ase­gura que todavía está cargando sacos. Por eso Carlos Luis, Calitao o Papa, es para todos, familiares, amigos y compañeros de faena, un gran enigma.

“Lo que más llama la atención, reflexiona Ángel Fonseca Gonzá­lez, director adjunto de la empre­sa, es que Calitao sigue dando el ejemplo y se mantiene asumiendo las labores que le corresponden, con los mismos bríos de los prime­ros tiempos”.

¿Cuándo piensa jubilarse Cali­tao?

Bueno —vuelve a reír—, esa pregunta me la hacen hasta los niños, y yo respondo que lo haré cuando el cuerpo me lo pida.

¿Y qué le está diciendo el cuer­po ahora mismo?

Si te sientes bien sigue en la lucha. No te detengas, me dicen el cuerpo y la conciencia. No se trata de dinero. No, lo que me interesa es llegar hasta donde pueda llegar.

Acerca del autor

Licenciado en Periodismo (Universidad de Oriente, 1986), máster en Ciencias de la Comunicación (Facultad de Comunicación Universidad de La Habana, 2010). Inició como colaborador (1999) y desde el 2008 es corresponsal de Las Tunas. Profesor adjunto de la Universidad de Las Tunas con categoría de asistente. Cumplió misión en la República de Haití (2000) y en la República Bolivariana de Venezuela (2018-2021). Es colaborar del Periódico 26 y de la emisora provincial Radio Victoria.

Compartir...

Un comentario en Día del Trabajador Marítimo-Portuario: Calitao y la aparente tranquilidad en Carúpano

Escribir comentario

© 2018 Trabajadores. Órgano de la Central de Trabajadores de Cuba
Director: Alberto Núñez Betancourt
Subdirectores Editoriales: Alina Martínez Triay y Joel García León
Territorial y General Suárez. Plaza de la Revolución. La Habana, Cuba. CP: 10698
Fax: 053 (7) 555927 E-mail: digital@trabajadores.cu