
Un recorrido en la mañana de hoy por las zonas de baño en el litoral de la bahía de Cienfuegos evidenció que las algas tóxicas que han provocado afectaciones a los vacacionistas y precisaron a cerrar una de ellas han disminuido, pero persisten.
Además de lo corroborado en la observación visual, los especialistas también reconocen que hay menor densidad de ellas, aunque sí están presentes aún en algunos lugares, por lo que el riesgo perdura, sobre todo en el sur—oeste costero.
Hace poco más de tres semanas unas cien personas de diferentes edades sufrieron afectaciones dermatológicas debido al contacto de la piel con esas plantas acuáticas. En los últimos días no ha habido nuevos reportes de casos, debido fundamentalmente a la alerta realizada, la disciplina de la población y las medidas adoptadas
Específicamente en el centro recreativo Villena, cuya zona de baño ha sido la más afectada, pudimos apreciar in situ que se ha reducido la presencia de las algas tóxicas. No obstante, se mantiene la vigilancia constante por razones obvias.
Sitios en Internet han reportado esta semana una “invasión” de sargazos de color marrón oscuro que amenaza con arruinar la temporada turística en las playas del Caribe.
No podemos asegurar que sean plantas acuáticas similares, pero resulta coincidente con lo sucedido en el litoral de la bahía cienfueguera.
La situación en la zona caribeña alcanza tal magnitud que algunos funcionarios han solicitado la realización de una reunión con carácter emergente.
¿De dónde provienen las algas? Expertos internacionales coinciden en afirmar que “hay varias teorías, pero la principal apunta a que su crecimiento se desbordó por los nutrientes contaminantes generados por la actividad humana”.