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Mijaín y Yasmani salvaron a la greco

Foto: Ricardo López Hevia, enviado especial de Granma
Foto: Ricardo López Hevia, enviado especial de Granma

Mississauga, Toronto.- Luego de fallar cuatro veces el miércoles, en las divisiones menores, la lucha greco cubana estaba exigida de sacudirse y maquillar un resultado que de todas formas quedará guardado como el peor de las últimas décadas en juegos panamericanos.

¿Cómo hacerlo? Gracias al extraclase Mijaín López y al portentoso jovenzuelo Yasmani Lugo, quienes se erigieron sin demasiadas complicaciones en las categorías de 130 y 98 kilogramos, respectivamente.

Mijaín, doble campeón olímpico y cinco veces del planeta, ganó sus tres combates con la tranquilidad de quien se sabe imbatible a este nivel, pero derrochando respeto a todos sus rivales.

Ante él cayeron como naipes el venezolano Moisés Pérez (9-0), el estadounidense Robby Smith (8-0) y el chileno Andrés Ayub (8-0), este último entrenado por el ex campeón cubano Nestor Almanza y congratulado como el primer luchador de su país capaz de ganar una medalla en estas lides.

«Estoy contento, dedicó esta victoria al pueblo de Cuba que sabía la iba a obtener. Este torneo me sirve de preparación para el Campeonato de Mundo de Las Vegas que es clasificatorio para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro», expresó tranquilamente y sin sofoco alguno apenas bajado del colchón.

«El estadounidense fue el rival más importante, el de más nivel, ha participado en eventos mundiales, pero como nos hemos enfrentado conocía sus habilidades y sus tácticas, así que no hubo problemas», añadió.

Interrogado sobre la falta de efusividad en su celebración, el ahora cuatro veces monarca de los Juegos (2003, 2007, 2011 y 2015) aseguró que sí disfruta imponerse en justas como estas, pero «como el nivel no es alto no me gusta abusar de mi forma de luchar».

Lugo, por su parte, fue muy superior al colombiano Oscar Loango (9-0), al brasileño Davi Albino (8-0) y al hondureño Kevin Mejía (4-0), los obstáculos camino a su primer título en lides de esta envergadura.

«Estoy feliz por esta medalla, nunca había participado en unos juegos panamericanos y pude lograrla. Ahora mi meta es llegar al campeonato mundial y obtener la clasificación olímpica. Me alegra poder darle esta corona a la delegación y a nuestro pueblo», dijo Lugo apenas culminado el duelo final.

El miércoles la selección clásica de la isla ganó bronces mediante Miguel Martínez (66 kg) y Alan Vera (85 kg), en ambos casos el propósito que llevaban, pero vio marcharse sin premio alguno a Ismael Borrero (59 kg), quien aspiraba al liderazgo en atención a su quinto lugar universal.

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