La lección de patriotismo y de intransigencia revolucionaria que legó a Cuba y al mundo Antonio Maceo Grajales con la Protesta de Baraguá fue recordada este 15 de marzo en Santiago de Cuba en la conmemoración del 137 aniversario del acontecimiento, que devino acto de apoyo al proceso bolivariano de Venezuela.
En Mangos de Baraguá, escenario donde el Titán de Bronce alzó su voz para rechazar la paz sin independencia que significaba el Pacto del Zanjón, pobladores del municipio de Mella junto a las máximas autoridades del Partido y el Gobierno en la provincia, entre otros dirigentes, rindieron honores al jefe mambí, a su tropa, y a la viril posición de no claudicar en los principios.
Junto a la base del obelisco que allí se alza fue colocada una ofrenda florar a Antonio Maceo en nombre del pueblo de Cuba y entre oratoria, poemas y canciones se patentizó el apego a la defensa incondicional de la soberanía y la dignidad de este país y de naciones hermanas.
En nombre de la nueva generación Jorge Suárez Pérez, primer secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas en la provincia, ratificó el compromiso signado en el Juramento de Baraguá y la voluntad de dar continuidad a la obra de la Revolución sin claudicar en las ideas.
El rechazo a la injerencia yanqui en Venezuela y a las declaraciones del gobierno norteamericano de considerar a ese país como una “amenaza” se hizo patente en las palabras de Lázaro Expósito Canto, miembro del Comité Central del Partido y su primer secretario en la provincia.
“El más firme respaldo a la revolución bolivariana y al gobierno legítimo conducido por Nicolás Maduro”, expresó Expósito, y acotó, “desde nuestra experiencia acumulada a través de décadas de hostigamiento por parte del imperio más poderoso que haya conocido la historia le ratificamos a nuestros hermanos venezolanos el apoyo incondicional y la convicción de que un pueblo unido jamás será vencido”.
