Con la tercera lechada en forma consecutiva (6-0), Artemisa se convirtió en el campeón de estreno en la serie nacional de béisbol para menores de 23 años, en lo que constituyó además la primera corona de un deporte colectivo para la joven provincia.
Otra vez los lanzadores fueron los protagonistas del éxito y el binomio Navid Luis Cosme- Yunieski García extendió a 27 ceros la sequía ofensiva de Camagüey, en tanto sus compañeros lo apoyaban con racimos de tres carreras en la segunda y quinta entrada, suficientes para definir el marcador.
Concluyó así, en apenas tres partidos, la final de un torneo que mostró su mejor cara en esta última ronda, aunque la defensa volvió a resultar el aspecto más débil, sin olvidar errores en la mecánica de juego que se deben aprender desde edades tempranas y son casi inadmisibles en esta categoría.
Para Jorge Luis Machado el debut como mentor ha sido de lujo y a todos agradó el gesto del equipo de dedicarle este triunfo, antes que a nadie, al lanzador Yadier Pedroso, fallecido el pasado año y uno de los mejores peloteros nacidos en el territorio, inspirador de muchos peloteros que vistieron ahora la camiseta artemiseña.
Sobre los agramontinos solo recordar que es la mejor actuación de un conjunto de béisbol de esa provincia en los últimos 15 años, lo cual refleja el serio trabajo que allí se realiza por revitalizar la pelota. Muchos de esos jóvenes volverán al terreno en la 54 Serie Nacional bajo el mando de Esteban Lombillo, con la aspiración primera de pasar a la segunda fase.
Al margen de las fallas, calendario atípico y ajustes necesarios para el próximo año, la realidad nos indica que este torneo será vital en el escenario futuro del béisbol cubano, dada la cantidad de jugadores que pueden mostrar sus virtudes para aspirar a ser elegidos para un eslabón más alto.
Por supuesto, habrá que trabajar en hacerlo un espectáculo —no lo fue ahora—, así como repensar lo conveniente o no de que sea paralelo a las Series Nacionales. Por el momento, Artemisa puede decir orgullosa que es diosa del béisbol sub 23 y festejar en grande.
Azules mandaron en la Antillana
Este fin de semana cerró también la XXII Copa Antillana de Acero con el triunfo de Industriales, vencedor 9-8 sobre Cienfuegos en el partido por el oro. El equipo del complejo siderúrgico terminó tercero e Isla de la Juventud fue cuarta.
El reporte de Senén Cuevas incluyó a Juan Carlos Torriente (IND) con el premio Roberto Labrada por ser el más valioso del evento; Guenadis González, de Antillana, fue líder de bateo (600), Lourdes Gourriel comandó las anotadas (8), Rigoberto Gómez (IJV) los hits (9) y Yander Santa María (IJV) las impulsadas (9).
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