Se dividen en tres: la vanguardia, que es la parte que busca la confrontación con la policía; una masa fluctuante que corre hacia los cordones de seguridad cuando parecen ganar la pulseada y vuelve a las corridas unos pocos segundos después ante los gases; y la retaguardia, que observa, come raspado, conversa, comenta el show en desarrollo. Para ellos no lo es: se trata de una batalla contra la dictadura que los reprime Continuar leyendo