Del Primer Congreso Nacional de Estudiantes efectuado en La Habana entre el 15 y el 25 de octubre de 1923, que a su vez surgió de un movimiento latinoamericano de reforma universitaria, nació una institución que buscaba la unión de estudiantes y obreros en el común propósito de revolucionar la sociedad cubana: la Universidad Popular José Martí(UPJM). Su principal inspirador fue Julio Antonio Mella, que la llamó “la hija querida de mis sueños”.

Dos acuerdos resaltan en la Declaración de los Derechos y Deberes del Estudiante propuesta por Mella y aprobada en el Congreso: el deber de los estudiantes de divulgar sus conocimientos en la sociedad, principalmente entre los obreros manuales, y el vínculo estrecho con la Federación Obrera de La Habana, cuyo liderazgo recaía sobre el destacado obrero tipógrafo y amigo personal Universidad Popular José Martí.
No existía entonces la imponente escalinata que distingue a la Universidad habanera, por eso para acudir a las clases que se iniciaron desde el 3 de noviembre de 1923 en que se inauguró la Universidad Popular José Martí, cientos de obreros ascendieron la colina. Como las aulas no estaban concebidas para la enseñanza nocturna y por tanto carecían de iluminación, estudiantes de ingeniería se encargaron de realizar la instalación eléctrica.
El surgimiento de la OPJM en una sociedad explotadora dominada por el imperialismo yanqui ´perseguía una meta mucho más ambiciosa que el vínculo de estudiantes y obreros para educar a estos últimos, sino buscaba preparar a la clase obrera para ejercer su papel como vanguardiatransformadora de la sociedad para alcanzar un régimen de justicia social.
Las materias abarcaban clases para analfabetos y el nivel primario de enseñanza, para la segunda enseñanza los temas eran Geografía Universal, Historia de la Humanidad y de Cuba, Psicología y Lógica, Gramática y Literatura, Cívica, Historia Natural, Estudios Generales (Medicina de Urgencia e Higiene), Maternidad y Profilaxis Sexual, Ciencias Naturales, Economía Política y Social, Derecho, Legislación del Trabajo, Moral Anti dogmática y Rudimentos de Ciencias de las Religiones, entre otras.
También se organizaban veladas cultuales sobre materias sociales y políticas, donde se incluían presentaciones artísticas escenificadas por grupos de aficionados de trabajadores y estudiantes, y se impartían conferenciasdominicales con temas sociales, en el cine Wilson, ubicadoen las calles Belascoaín y San Rafael.
A causa de la claudicación de algunos dirigentes estudiantiles y la acción de las fuerzas reaccionarias la Facultad de Derecho de la Universidad dejó de ser la sede de la UPJM y tuvo que trasladarse a otros escenarios como ellocal de la Federación Anticlerical de Cuba, ubicada en la calle Reina No. 72, así como a las sucursales de los barrios de Luyanó y Príncipe. Se abrieron filiales en San Antonio de los Baños, Santiago de las Vegas, Regla y Guanabacoa. También se impartieron las clases en el Instituto de Segunda Enseñanza de La Habana, locales sindicales como la Federación de Torcedores de la Habana, entre otros.
La foto que acompaña a este texto donde aparecen varios profesores de la UPJM fue tomada precisamente en la escalera que conduce al segundo piso del actual Palacio de los Torcedores, y entre los docentes se encuentran el propio Mella y Rubén Martínez Villena, además de estudiantes e intelectuales destacados
La salida de Mella para México no lo apartó de la UPJM cuyas labores siguió a la distancia, no obstante, esta fue clausurada por el tirano Gerardo Machado en 1927. Sobre este hecho y la trascendencia de esta institución le escribió Malla a su compañera de luchas y amiga Sarah Pascual:
. «[…] La Universidad Popular no es una sociedad secreta insurreccional. Esto lo saben hasta los mismos policías. Pero la enseñanza de la Universidad Popular José Martí ha insurreccionado a más de una conciencia dormida y domesticada, la ha insurreccionado contra el despotismo político, contra la injusticia económica, contra la dominación extranjera, contra el «valor» de la ignorancia. La declaración de ilegalidad es un galardón más para la Universidad. En los momentos en que la fuerza bruta reina como una fórmula política, es natural que la Universidad Popular José Martí sufriera, como la Universidad y el Instituto de La Habana una «prudente» clausura»
Acerca del autor
Graduada de Periodismo en 1974 y Master en Ciencias Políticas de
enfoque Sur, Al graduarse pasó a atender temas históricos e
ideológicos y viajó a varios de los antiguos países socialistas. Al
pasar al periódico Trabajadores, escribió para el Suplemento de
salud durante varios años y realizó la cobertura del segundo
contingente de la brigada médica en Guatemala. Posteriormente fue
jefa de la edición digital y subdirectora editorial hasta mayo de 2025
que se jubiló y se recontrató en la publicación. En el transcurso de
su ejercicio profesional Ha ganado premios en concursos
periodísticos y de humorismo.

