Cargando...Del recién finalizado evento internacional Noviembre Fotográfico, organizado por la Fototeca de Cuba en coordinación con el Consejo Nacional de las Artes Plásticas, quedan en la memoria algunas trascendentales muestras, como la titulada Cartografías del cuerpo y la memoria: diálogos entre Canadá y Cuba, inicialmente presentada en la galería Carmen Montilla y luego trasladada a la Casa Museo Alejandro de Humboldt, ambas entidades ubicadas en La Habana Vieja.
La muestra, inaugurada con la presencia de la Excelentísima Señora Marianick Tremblay, embajadora de Canadá en Cuba, fue una celebración de los 80 años de relaciones diplomáticas entre ambas naciones, sobre las que resaltó sus vínculos culturales y artísticos; amén de invitar al espectador a explorar las profundas resonancias que la memoria y el cuerpo tienen en nuestras identidades colectivas e individuales. La artista canadiense Alyssa Kusik y los creadores cubanos Lissette Solórzano y Denys San Jorge ofrecieron, a través de sus respectivas obras, un enriquecedor diálogo trascendido por sus perspectivas ideo-estéticas y sus habilidades personales.
Alyssa Kusik: juego entre lo material y lo simbólico
Alyssa Kusik, artista y directora de fotografía canadiense conocida por su enfoque contemporáneo y multidisciplinario, presentó una serie de obras (esculturas, vestidos y tapices) que desafían las nociones tradicionales de género, identidad y espacio a través de su práctica artística; suerte de llamado a la introspección y al disfrute a través de un juego entre lo material y lo simbólico. Diversas técnicas y materiales —como hilos de diferentes grosores y colores—, emplea esta reconocida creadora para transmitir mensajes que invitan a los espectadores a considerar cómo sus propias memorias y experiencias personales pueden devenir narrativa colectiva.
Entre sus propuestas artísticas; amén de vestuarios y composiciones iconográficas relacionadas con la mujer, la Kusik concibió en la galería Carmen Montilla un pequeño telar, con el fin de que los espectadores interactuaran con este milenario proceso creativo.
Lissette Solórzano y el símbolo universal de la libélula
Las obras de la prestigiosa fotógrafa, creadora de las artes visuales y curadora, Lissette Solórzano, directora de la Fototeca de Cuba, exploran experiencias individuales, historias de resiliencia que ella concibió mediante el uso de cajas de luz en las que sobresalen, sobre coloridos fondos abstractos, figuraciones de libélulas, insecto de la familia de los Anisópteros que con sus delicadas alas y ágiles movimientos, simboliza la vulnerabilidad y coraje entre los seres humanos, de ser abiertos, honestos y estar expuestos ante los riesgos que conlleva el acto de existir en estos convulsos tiempos.
La artista nos conduce a reflexionar sobre algunas de las características de la libélula, tales su nacimiento en el agua, reflejo de la profundidad emocional para confrontar y expresar nuestros sentimientos, mientras que su aterrizaje en la tierra representa la estabilidad y la resiliencia. También simboliza que la vulnerabilidad no es debilidad, sino una poderosa forma de conducirnos a ser fieles a nosotros mismos. Por otra parte, la confianza de este insecto en el Sol puede interpretarse, además, como el poder transformador de la fragilidad para impulsar el crecimiento y el cambio personal, empujándonos a evolucionar y encontrar fuerza a través de la autoexpresión virtuosa.
Esa conexión del hombre con la vida de la libélula, destaca, en el imaginario de Solórzano, cuestiones inherentes a nuestra existencia emocional, mental, física y espiritual.
La Toponimia mecánica de Denys San Jorge
Denys San Jorge, otro destacado fotógrafo, pintor, escultor, curador y escritor, complementa esta exposición con varias de sus obras que integran la serie Toponimia mecánica, las cuales indagan sobre la memoria y la identidad. Su enfoque conceptual se manifiesta en composiciones que juegan con la idea de la geografía como un constructo cultural y emocional.
A través de materiales reciclados, como llaves, barrenos, taladros, tuercas, pinzas y láminas de metal utilizados por su tempranamente fallecido progenitor en fatigosas jornadas como chapista y soldador, este artífice crea imágenes fotográficas que estimulan la reflexión sobre diferentes zonas de la geografía mundial, entre estas varias regiones de Canadá (Montreal, Québec, Toronto, Kingston y Sherbrooke), así como en el nombre de ese país norteño. Lugares impregnados de memorias e historias, muy en concordancia con la idea de esta muestra concebida en homenaje a las ocho décadas de relaciones diplomáticas entre aquella nación y Cuba.
San Jorge nos recuerda que los lugares que habitamos y los objetos que nos rodean son portadores de historias que forman parte de la memoria colectiva del mundo, la cual, a menudo, se olvida en el frenético ritmo de la vida moderna.
Cartografías del cuerpo y la memoria: diálogos entre Canadá y Cuba fue memorable ejemplo de cómo el arte puede servir como un medio poderoso para explorar la identidad y la memoria. Las obras de Alyssa Kusik, Lissette Solórzano y Denys San Jorge nos invitaron a cuestionar y celebrar nuestra propia cartografía interna, al reflejar tanto la singularidad de nuestras experiencias individuales como la riqueza de nuestras conexiones colectivas, en un momento en que la comunicación y el entendimiento entre naciones son más importantes que nunca. Esta muestra se erigió como emblema de diálogo y reflexión artística que trasciende fronteras.
