Holguín.— Desde las seis y treinta de la mañana “hasta que den las fuerzas” es el nuevo horario laboral que le dejó Melissa a los linieros eléctricos de esta provincia. “Son días intensos”, afirmó Rubiel Almaguer Aguilera tras bajar de uno de los tantos postes dañados en la ciudad cabecera, y añadió que “ante los daños provocados por fenómenos naturales tenemos que mostrarnos invencibles”.
Admirable resistencia exhiben también trabajadores de las comunicaciones, recursos hidráulicos, comunales y la construcción, por solo citar algunos sectores. El huracán dejó por estas tierras mucho que enmendar: hasta este sábado se contabilizaban más de 442 mil afectaciones en toda la provincia.
Al cierre de esta información se habían registrado perjuicios en 17 mil 141 viviendas, 141 instituciones de salud, 510 centros educativos, 204 circuitos eléctricos, 343 postes telefónicos y en unas 22 mil hectáreas de cultivos de plátano, yuca, boniato, maíz, frijol, arroz, malanga, hortalizas y frutales.
Aunque los daños ocasionados por el evento meteorológico son considerables, la ágil respuesta recuperativa ha permitido restablecerles el servicio eléctrico a más del 75 % de los clientes, recoger cifras superiores a 311 mil metros cúbicos de desechos sólidos y revitalizar labores en escuelas, así como servicios de transporte y acueducto.
En los 14 municipios está igualmente la movilización de las secciones sindicales. Idalmis Serrano Gómez, secretaria general de la CTC en Holguín, explicó que inmediatamente después del paso de Melissa se pusieron en función de higienizar centros de trabajo y extender la limpieza al entorno comunitario.
Las horas de recomposición han contado con manos solidarias llegadas desde otras provincias, tanto para apoyar prioridades como entregar donativos de alimentos y ropas, gestos que se agradecen inmensamente.
