Mientras se alejaba de territorio cubano el huracán Melissa y en Camagüey se comprobaba si había dejado secuelas, el pueblo agramontino se movilizaba para acopiar donativos para los más afectados.
Ropas, alimentos, calzados y todo lo que se pudiera y desde el corazón, así se fueron conformando valijas que se recogen en oficinas de la Central de Trabajadores de Cuba, de los sindicatos, de direcciones provinciales de organismos y hasta en casas particulares.
Tras la respuesta se envió esta semana una primera caravana con varios vehículos cargados de dichos donativos hacia la provincia de Granma.
Como precisó María de los Ángeles Mesa Pérez, secretaria del buró provincial del Sindicato Nacional de Trabajadores de las Comunicaciones, Informática y la Electrónica, esto es una primera pequeña muestra, «pero con la cual demostramos que no están solos, que Cuba y el pueblo de Camagüey está con ellos».
En esta ocasión los donativos proceden de los municipios de Camagüey, Minas y Vertientes, y reúnen obsequios de trabajadores, federadas, jóvenes y de miembros del sector no estatal, en tanto se alistan los del resto de los territorios para próximos envíos.
Desde la plaza de la Revolución Mayor General Ignacio Agramonte partió la comitiva cargada de alimentos no perecederos, carbón vegetal, alrededor de 20 mil prendas de ropa y calzado, así como otros insumos de cocina, libros, medicamentos, elementos para la construcción de viviendas y medicamentos.
