Refiere que el 23 de septiembre le correspondió adquirir la balita de gas licuado (GLP) en el punto de venta Polígono. Estaba a la mitad de llenado al igual que la de su hija, Sulaine Martínez Carrazana, quien compró un día después.
“Cuando mi nieto las compró y preguntó al dependiente por qué estaban así, le respondieron que era una medida para que más usuarios puedan acceder al GLP. Añado que a pesar de ser a la mitad del gas, el precio es el mismo que si estuviese llena ($180).
“No es justo que después de casi ocho meses esperando la tan anhelada balita y enfrentando la dura situación eléctrica que presenta Granma, la vendan a mitad de su llenado”.
¿Es alguna artimaña de los dependientes? ¿Será cierto que se tomó esa medida? ¿Sabrá de esto el gobierno de Bayamo?¿Ocurrirá solo en este punto de venta?