La superficie corresponde a la campaña de siembra de primavera, que va de marzo a agosto, y se estima pueda aportar unas 5 400 toneladas de arroz húmedo, según afirmó Juan Carlos Balmaseda Hernández.
El director general de la entidad señaló que una parte se dedicará a semilla y resto será procesado en el secadero Raúl Cervantes, en la localidad de Falla, también en Chambas, con destino a la venta en las unidades minoristas del Ministerio de Comercio Interior del territorio avileño, mientras el resto va a puntos de venta y ferias en el propio municipio, así como los de Florencia, Morón, Venezuela y Majagua.
Con capacidad para procesar 30 mil toneladas del cereal al año, la instalación, de tecnología brasileña, tiene proyectado para este año, entregar apenas 5 800 toneladas de arroz consumo, con una calidad comparable a la de arroces importados.
El plan se debe al bajo rendimiento agrícola del grano que logran las bases productivas, afectado por la insuficiencia de fertilizantes, plaguicidas y portadores energéticos necesarios en el cultivo, causada por las severas limitaciones económicas que enfrenta el país y por el recrudecido bloqueo.
Aunque también lo afectan los persistentes apagones, el colectivo de 42 trabajadores del Raúl Cervantes labora en los momentos en el que dispone de la energía, sea de día o de noche, en la recepción y molinado del cereal, esfuerzo que se premia con un satisfactorio 65 por ciento de aprovechamiento.
Balmaseda Hernández ratificó que este año la Empresa Municipal Agroindustrial Máximo Gómez Báez sembrará un total de 4458 hectáreas de arroz, tarea en la que participan 29 formas de producción estatales y campesinas diseminadas por Chambas, Ciro Redondo, Venezuela, Morón y Majagua.