Héroes y Heroínas del Trabajo: Prohibido olvidar… necesario atender

Héroes y Heroínas del Trabajo: Prohibido olvidar… necesario atender

1 Estrella2 Estrellas3 Estrellas4 Estrellas5 Estrellas (20 puntos, 4 votos)
Cargando...

Tiene 83 años de edad el más “pillo” de los Héroes del Trabajo de la República de Cuba. Vive en Artemisa y aún no hay motor ni caja que se le resista a la ma­gia de echarlos a andar. Siempre tiene la vesti­menta tatuada con grasa y la marca de hierros y herramientas en sus manos obreras.

Cuando la jubilación los sorprende, trabajar sigue siendo motivación, asegura Pillo a sus 83 años de edad y cuentapropista. Foto: Otoniel Márquez

“Trabajo, trabajo y trabajo”, dice Elpidio Hernández Soa. “Pude tener otro oficio, pero desde 1958 anduve de mecánico entre guaguas en la terminal local, y a veces en algún flete”, hace un guiño y sonríe.

“Lo mío es el ruido desde abajo. Entraba al taller antes de las ocho de la mañana y si al­guien no me alertaba: ‘Pillo, ya son las diez de la noche’, seguía entre tornillos, tuercas y so­luciones. Así pasaron 51 años de vida laboral y unas 80 mil horas de trabajo voluntario”, alega y es fácil deducir por qué recibió el Título Ho­norífico de Héroe del Trabajo en 1998.

Como él, otros 392 trabajadores en el país (187 ya fallecidos, entre ellos 33 mujeres), han recibido —a propuesta de la CTC— esa conde­coración, instituida hace 42 años por el Consejo de Estado. También la ostentan 19 campesinos de manos de la Asociación Nacional de Agri­cultores Pequeños (Anap), dos son féminas, siendo común en la mayoría vivir su etapa de jubilación como Pillo.

“¿Ahora?, trabajo igual, pero como cuenta­propista en un taller en mi casa, que ha sido escuela para estudiantes y obreros calificados. Enseñar me satisface tanto como echar a rodar una ambulancia u otros vehículos indispensa­bles”, subraya Elpidio.

“La CTC en Artemisa y el sindicato me convidan casi siempre a las actividades por el Primero de Mayo. De la empresa de transporte actual no conozco casi nada ni a casi nadie, no obstante estar dispuesto a ayudar, pero al pa­recer no me necesitan.

“Recuerdo atenciones como casas en la pla­ya que disfrutaba por una semana. Era mi gra­titud al apoyo de la familia. Para dedicar tiem­po a la mecánica hay otros en la retaguardia, por decirlo así. Estamos lejos de ser tratados por cuánto representamos para el país”.

En los 11 municipios artemiseños solo nue­ve trabajadores ostentan actualmente el título honorífico —solo dos de ellos en los últimos 15 años—, y la mayoría concuerda con similares insatisfacciones a las de Pillo.

 

Amarguras entre azucareros

Azucareros, educación, ciencia y deporte, salud, agropecuarios, forestales y tabacaleros son los sindicatos con más héroes y heroínas, Renán, uno de ellos, insiste en la desatención. Foto: José Luis Martínez Alejo

Fidel colocó la estrella dorada el 4 de mayo de 1997 en el pecho del operador de combina­das Renán Cabrera Franco, quien pasó por las cuchillas de su veterana cosechadora más de 80 millones de arrobas de caña, en campos de la unidad básica de producción cooperativa (UBPC) Arabal, del municipio de Chambas, en Ciego de Ávila.

Se mantuvo en el cañaveral hasta acogerse a la jubilación para atender a su esposa enferma. En su misma vivienda recientemente nos reiteró lo destacado de cinco años atrás: “Me dicen que tendrá solución mi casa; hace falta impermeabi­lizarla, pero nada hacen. Ahora menos, pues es­toy jubilado, es como si estuviera muerto…

“Esta es otra historia antigua: Muy difícil adquirir de manera estable gasolina para mover el carro y que no se me eche a perder en el ga­raje, aunque recientemente me brindaron ayuda cuando mi compañera estuvo hospitalizada.

“¿Cuándo me percaté del retroceso de la atención a los héroes, mejor dicho, de la desatención?, hace mucho tiempo, por ejemplo, quitaron las estimulaciones, las cuales eran un factor de motivación para el alto desempeño la­boral. Así lo cree también el artemiseño Rey­naldo Espinosa Collazo, más conocido por Upi­ta, Héroe del Trabajo y presidente de la UBPC cañera Rigoberto Corcho, al reconocer que, “en el factor humano debemos pensar más, actuar de inmediato.

“¿Qué pasa con la producción de azúcar y la emulación socialista? ¿Dónde quedó el estímulo a los cortadores de caña, millonarios, unidades o empresas? ¿Qué satisfacción tienen los sobre­cumplidores? ¿Cómo una familia siente orgullo de su obrero azucarero?

“En Cuba se estimulan con autos a médicos y deportistas muy destacados. No diré jamás que inmerecidamente, pero ¿y el resto de los sec­tores? No hablo solo por mí ni por quienes están activos laboralmente, sino por los héroes o he­roínas que andan cabizbajos en decenas de colas diarias por medicamentos en la farmacia, el pan o la balita de gas, sin que nadie estime la presen­cia de un cubano excepcional”, expresó Upita.

 

La voz femenina cuenta

Hilda Reyes López, obrera de la unidad empre­sarial de base Empacadora de la Industria de Alimentos, aledaña al puerto habanero, recibió el título honorífico en el 2021, y “aunque soy jefa de brigada mi salario apenas sobrepasa los 3 mil pesos.

“Por eso voy a jubilarme para volver a con­tratarme, pues también soy viuda y la pensión que recibo por ese concepto es muy baja. Sé de los muchos problemas del país y que la situa­ción es difícil, pero ni siquiera recibo combus­tible para el carrito, el cual desearía cambiar­lo”, comentó, entre otras tantas desatenciones que merecen ser tenidas en cuenta.

La Habana cuenta con el honor de 71 tra­bajadores con el alto mérito. Quienes lo mere­cieron dentro de las Fuerzas Armadas Revolu­cionarias y el Ministerio del Interior declaran buen trato y seguimiento en su atención, un pa­norama que no es igual en los demás sectores.

A poco más de 400 kilómetros de La Ha­bana, en Ciego de Ávila, mencionar el título honorífico solo puede ser comparado con una estrella fugaz si se trata de selección, entrega y homenaje perdurable a quienes ostentan ese mérito.

Han transcurrido 31 años desde el primer otorgamiento al jefe de los constructores del pedraplén Turiguanó-Cayo Coco, luego a una mujer y a otros cinco hombres. Hace casi dos décadas que no sube al podio otro avileño a re­cibir ese tipo de medalla dorada de campeón en el escenario laboral.

Verania, la única avileña Heroína, activa laboralmente con un salario nominal inferior a cuatro mil pesos. Foto: José Luis Martínez Alejo

La mujer avileña está representada en esa lid élite solo por Verania Felicia Hernández Peláez, de extraordinarias cualidades, acreedora del Premio Nacional a la Innovación de Mayor Im­pacto Económico y Social y la Réplica del Carné de Innovador que ostentó en vida el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, entre otras distinciones.

A 22 años de que el Líder Histórico de la Revolución la condecorara, momento calificado por ella como el más feliz de su vida, la especia­lista del Departamento de Suelos y Fertilizan­tes de la Delegación Provincial de la Agricul­tura, opinó que “ha existido despreocupación al atenderlos porque antes la CTC, el Sindicato, el Partido, la Administración, tenían presente que cuentan en sus filas con un Héroe del Tra­bajo, quien ha entregado su vida a la Revolu­ción y está dispuesto a mantener esa postura.

“Ningún tipo de atención existe ni una vi­sita para preguntar cómo estás, qué problemas tienes, pues aunque no me lo vayan a resolver, uno siente la preocupación”. Verania, incluso, es la única avileña heroína activa laboralmen­te, con unos 4 mil pesos de salario.

“Estoy bien de salud, aunque mi vivienda, construida hace más de 40 años, que requiere re­paración, con persianas cayéndose y puertas de­terioradas, pero mi salario no da para comprar cemento y bloques. Ojalá pudieran ayudarme”.

 

Donde también la estrella es fugaz

En Manzanillo, Granma, tres mujeres distingui­das con el máximo galardón enfrentan sensibles dificultades en su vida cotidiana, a pesar de sus invaluables aportes a la sociedad durante años.

Ellas dedicaron su vida laboral al creci­miento de la Empresa Pesquera Industrial de Granma (Epigran), y denuncian la marcada in­diferencia con la cual en ocasiones tratan los problemas aquellos que les deben todos los be­neficios, a pesar de estar jubiladas.

“Esa buena atención y ese interés no se ven —explicó Tomasa Salvadora López Rivera, quien es Heroína del Trabajo desde el 2018—, somos nosotras quienes vamos a ver a los di­rectivos de la entidad y a los representantes del sindicato para que conozcan determinadas si­tuaciones y nos puedan ayudar. Es como si es­tuviéramos en el olvido”.

Por su parte, María Arsenia Ortega García (con la alta condecoración desde el 2016) opinó con mucho pesar sentirse injustamente relegada a un plano de total abandono: “Nosotras dimos, y damos la vida por esta Revolución, y nunca hemos pedido nada a cambio, sin embargo, de­ben tenernos un poco más en cuenta. Es muy necesario darnos la mano en estos momentos”.

Según sus consideraciones, no son muchos los centros del país con el honor de tener a tres Heroínas del Trabajo ni tampoco tantos los municipios con tal condición; es un privilegio que parece ser ignorado a ambas instancias.

“No quiero recibir nada por encima de lo que merece el pueblo, pero por alguna parte de­ben hacernos notar, además de la satisfacción personal, que todo nuestro esfuerzo sí ha vali­do la pena. Deben acercarse a nosotros un poco más, conocer nuestras situaciones y prestarnos atención”, enfatizó.

La octogenaria Sara Rosales Alarcón, quien sufre las secuelas de una isquemia ce­rebral, afirmó no recibir visitas de nadie para mostrar preocupación por su delicado estado de salud. Con esa condición y bajo un notable resentimiento sostiene que “a mí me han aban­donado”, pues se siente atropellada día a día por los avatares de la actual situación econó­mica.

De manera general, y de acuerdo con las afectadas, sus principales problemas incluyen: viviendas en mal estado, acceso regular al agua potable, lo cual agrava su situación sanitaria; dificultades para adquirir alimentos básicos, escasez de dinero en efectivo y problemas de transporte para asistir a consultas médicas, como es el caso específico de Sara.

 

Del lado de las respuestas

José Antonio Pérez Pérez, miembro del Se­cretariado Nacional de la CTC, a cargo de los asuntos económicos y la emulación, ofreció de­claraciones sobre el tema.

“La indicación es que la atención se incluya en los Convenios Colectivos de Trabajo, a fin de respaldar las principales decisiones con apoyo en el plan de la economía de las entidades.

“De ser así, entonces habría presupuesto para reparar viviendas, asignar combustible, comprar módulos de alimentos y otras necesidades”.

Desde Granma, Yolennis Cintra Acosta, funcionaria de la Esfera de Asuntos Económi­cos de la CTC, afirmó que “a los héroes se les facilitan condiciones de tipo material y para el cuidado de la salud acorde a las circunstancias actuales, así como en lo espiritual, para lo cual se siguen los protocolos.

“Reconocerlos es una prioridad. Y aunque las circunstancias no sean las ideales nuestra responsabilidad es apoyarlos dentro de lo posi­ble”, dijo; no obstante, se perciben incongruen­cias con lo expresado por las heroínas.

Pérez Pérez explicó que “en el 2023 com­probamos que hay un grupo de héroes con muy mala situación en sus viviendas. Ese es un tema a atender por los sindicatos, los organismos y los gobiernos territoriales para ver las fuentes de financiamiento y el plan de materiales.

“Tenemos que actualizar el levantamiento, pero no es un asunto nuevo. Hace muchos años que se habla de resolverlo, siempre partiendo de las condiciones de Cuba. Aunque la solución no llega.

“Ha sido una demanda la asignación de combustible a quienes poseen automóviles, pero solo una cifra mínima de ellos la recibe por decisión de sus organismos o entidades.

“Al cierre del 2023, 37 héroes jubilados te­nían una pensión inferior a 2 mil pesos, mien­tras otros 60 estaban en diferentes escalas por debajo de 5 mil pesos. En ese momento, a un centenar de ellos se les incrementó su pensión entre 7 mil y 10 mil pesos”, dijo, mientras quie­nes están activos se encuentran muy desfavore­cidos, al contar solo con el salario básico.

De los 205 héroes y heroínas de la CTC vi­vos alrededor del 50 % está jubilado. A la ma­yoría ya se les aumentó la pensión en el 2023.

Además, enfatizó en la necesidad de asegu­rar la presencia de ellos en actividades políticas y sociales, “no como invitados de ocasión, pues es su derecho; en que sean más publicadas sus historias de vida desde los sindicatos, como un efectivo reconocimiento. ¡Hay potencialidades a poner en práctica creativamente!”, señaló.

“Es imprescindible el sistemático chequeo médico que existía antes y que ahora no se hace, al menos de forma efectiva”, aseveró.

“La atención a los héroes y heroínas tam­bién se materializaba mediante el sistema de estimulación aprobado por la CTC para tra­bajadores y colectivos vanguardias, y al dejar de existir este en el 2009, quedó desprovisto de una norma legal y solo permanece según la responsabilidad de la entidad, organismo, sin­dicato o CTC correspondiente. Darle un vuelco a la situación actual, no depende de grandes decisiones”, puntualizó José Antonio.

 

¿Reservas?, sí, incluso de afectos

Dignificar las hazañas, que ni tan fáciles ni tan comunes los trajeron hasta el título honorífico, tiene todavía muchas deudas. Algunas plasma­das aquí y otras por escribir.

Ellos, tan sencillos como la estrella dorada que merecieron, andan por nuestras calles y cam­pos como cubanos comunes, aunque no lo son. Muchas veces, solo es frecuente el reconocimiento de mayo en mayo, y ni siquiera en todos los casos.

¿Es exclusivo de la CTC atender y acompa­ñar a los Héroes y Heroínas del Trabajo de la República de Cuba?

Corresponde a todos. Al movimiento sindi­cal en primerísimo lugar, pero para eso es im­prescindible el apoyo gubernamental y de or­ganismos e instituciones que garantizarían las decisiones y el ornamento legal y financiero.

Si en Cuba los Premios Nacionales de la Música, de Literatura, y de otros sectores reci­ben 20 mil pesos mensuales por ese alto reco­nocimiento, ¿por qué no igualar en una escala salarial justa a los Héroes y Heroínas del Tra­bajo de la República?

¿Será imposible para estos 205 en la actua­lidad, una semana vacacional en centros del tu­rismo u otros? ¿Por qué no puede su atención ser prioridad dentro del sistema de Salud Pública?

En concordancia con la CTC existen indi­caciones, pero, ¿se cumplen?

Aun cuando hay iniciativas locales bien escasas no deben desaparecer las ideas para atender a estos hombres y mujeres. La esponta­neidad no puede ser la norma, pues a todos los une igual estrella dorada, sea cual sea la pro­vincia, sindicato o municipio donde vivan.

Habrá que integrarse y poner el pensamien­to colectivo en acción para atender las desaten­ciones. Urge normar, legislar, crear, motivar, exigir la atención a nuestros héroes y heroínas, y ponerlo en los planes tal como existen otras tareas o indicadores medibles.

 

El 21 de julio de 1983, en el Palacio de la Revolución, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz imponía el Título Honorífico de Héroe del Trabajo de la República de Cuba en el pecho de Blas Roca Calderío, quien se convertía así en el primero en lucir la Estrella de Oro acreditativa.

Cinco días después, en la soleada tarde del 26 de julio, en Santiago de Cuba, crecía el número cuando cinco trabajadores recibían, también de manos de Fidel, ese honor de Héroe del Trabajo de la República de Cuba, el más alto galardón en el quehacer laboral cubano.

¿Los elegidos?: los macheteros Ramón Martinto y Celia Hernández, el inseminador Francisco Díaz Febles, el chofer Esmel Saab Barrera y el operador de combinadas cañeras Arcel Quevedo.

Hasta entonces el lauro mayor era el de Héroe Nacional del Trabajo, y podía obtenerse por más de una ocasión.

El título se entrega en fecha cercana al Primero de Mayo, aunque en ocasiones la ceremonia se ha realizado en otro momento.

Acerca del autor

Desde 2005 el periodismo me abre las puertas en Radio Artemisa, con la posibilidad de reorientar mi carrera al cursar estudios en el Instituto Internacional de Periodismo José Martí. Soy licenciada en Educación, en la especialidad de Defectología, y ya había cumplido varias tareas, incluso en la Unión de Jóvenes Comunistas.
Los resultados en el medio radial me condujeron a que, en 2011, al crearse la provincia de Artemisa, ocupara la responsabilidad de Corresponsal Jefa de la Agencia de Información Nacional, nombrada poco después Agencia Cubana de Noticias.
En ese mismo tiempo, alternaba como parte del ejecutivo de la Unión de Periodistas de Cuba, en el territorio, y posteriormente me desempeñé como su Presidenta; hasta que, en agosto de 2014 la dirección del Partido me designó directora del su Órgano Oficial, el periódico El Artemiseño, labor que continúo desempeñando.
Las funciones de dirección siguen aportando a la pasión por el periodismo, de ahí que mantenga publicaciones del acontecer de mi provincia en mi órgano de prensa Artemiseño, y en medios nacionales de comunicación, con mayor estabilidad, y representando tanto de compromiso como de orgullo, en el periódico Trabajadores.

Licenciado en Comunicación Social. Economista y periodista. Escribe sobre asuntos económicos, agropecuarios, de la construcción y la cultura. Multipremiado en concursos de periodismo, festivales de la radio y otros eventos. Atesora las distinciones Félix Elmuza y Raúl Gomez García, los sellos Laureado y 50 aniversario del periódico Trabajadores, y la Moneda Conmemorativa 60 aniversario de la UPEC.

Compartir...

6 comentarios en Héroes y Heroínas del Trabajo: Prohibido olvidar… necesario atender

  1. Excelente articulo..felicito a los periodistas por seleccionar este tema, muy sensible y muy necesario, ojalá sea un tema recurrente, que no se quede aquí entre nuestros humildes comentarios…coincido con BRUNO, no son solo estos héroes, hay otros héroes que igualmente han quedado en el olvido…la cifra de héroes del trabajo no llega a 250 en todo el país (considerando los que no están físicamente), no se si es posible que tengan una asociación que les dedique tiempo, atenciones y soluciones o que los integren en la asociación de combatientes, porque igual son combatientes de y por la revolución cubana. empuñar un fusil y estar dispuesto a dar la vida por la patria es digno, pero no tiene menos méritos, quien además de estar dispuesto a empuñar el fusil es capaz (durante mucho tiempo) con su altruismo, de recuperar una maquinaria, inventar una vacuna o crear potenciadores para el cultivo, todo en función de defender y mantener esta revolución, al igual que nuestros campeones olímpicos y glorias deportivas (que tampoco son demasiado), los que igualmente defendieron nuestra patria y hoy también están olvidados en algún rincón…la solución ahora mismo no se cual es, pero si estoy segura que necesitamos mostrarle a las nuevas generaciones, a las de hoy y a las del mañana que «ellos» son nuestros y sus héroes y que su historia merece ser conocida y repetida.que ellos son el ejemplo para mantener viva esta revolución a pesar de los fuertes vientos y las mareas…y a los héroes hacerlos sentir que su lucha y su sacrificio aun nos llenan de orgullo….que hoy nos toca ocuparnos de que en el ocaso de sus vidas se sientan como los reyes que son….este tema tiene tela por donde cortar…pero tenemos las tijeras y las costureras y sastres para hacerle el «traje a la medida»

  2. Héroes y Heroínas del Trabajo: Prohibido olvidar… necesario atender

    Desde ya hace varios congresos ese tema se discute, pero mientras quede a la voluntad de quienes puedan resolverlo no se logrará nada.

    Esperamos que algún día sea cambiado por:

    Héroes y Heroínas del Trabajo: Prohibido olvidar… obligado atender

  3. A pesar de hace 1 año haber obtenido esta condición, y sabemos que no debemos exigir nada solo el cumplimiento de cada tarea asignada o esfuerzo realizado por ejemplo me han dicho que soy la única heroínas del trabajo de la provincia artemisa del sector salud y les digo mi organismo provincial si se entero no me han invitado a ninguna sección ya sea de recorrido o encuentro con otros compañeros del sector .La ctc provincial me ha invitado a dos eventos
    No somos invisibles y en estos tiempos los encuentros entre jóvenes y centros laborales se pueden potenciar

  4. Muy buen artículo muy humano y es necesario NO SOLO CITARLO SINO SEGUIRLO
    PUES LAS ENTIDADES TIENEN MALAS MEMORIAS ESO OCURRE TAMBIÉN EN EL INDER CON LAS GLORIAS DEPORTIVAS MUCHAS DESATENDIDAS Y OLVIDADAS TODAS ESTAS PERSONAS HAN DADO Y DAN SU VIDA POR ESTE PAIS Y ESTAN EN UN RINCON. DEBE HABER UN DEPTO EN LA CTC NACIONAL Y EN CONSEJO DE MINISTROS QUE ATIENDAN CON LA MANO A ESTAS PERSONAS Y ESTABLECER PAUTAS COMO SALARIOS, ETC Y REVISARLOS A TRAVES DE LOS GOBIERNOS
    Y QUE ESAS PERSONAS TENGAN LOS #S TELEF.DE LA CTC NACIONAL Y CONSEJO DE ESTADO INCLUYENDO A LAS GLORIAS DEPORTIVAS PERO ES INACEPTABLE QUÉ SIGAN CON ESE GRADO DE DESATENCIÓN ES BOCHORNOSO.

    • Gracias por su opinión, coincidimos y buscamos sensibilizar a todos los que les corresponde atender y entender.

Escribir comentario

© 2018 Trabajadores. Órgano de la Central de Trabajadores de Cuba
Director: Alberto Núñez Betancourt
Subdirectores Editoriales: Alina Martínez Triay y Joel García León
Territorial y General Suárez. Plaza de la Revolución. La Habana, Cuba. CP: 10698
Fax: 053 (7) 555927 E-mail: digital@trabajadores.cu