Maceo:
Yo soy simplemente un ciudadano que viste el traje de guerrero porque la guerra, en el último cuarto del siglo XIX en que aún no se vive según razón y derecho, necesita prestar su fuerza al derecho y la razón en los pueblos que, como Cuba, continúan bajo el régimen del inmoral y odioso derecho de conquista.
Creo en la lucha armada como única solución para los pueblos que luchan por liberarse y soy consecuente con mis creencias. Muchos me dirán aventurero, y lo soy, solo que de un tipo diferente y de los que ponen el pellejo para demostrar sus verdades.
Maceo:
¿A qué intervenciones ni injerencias extrañas que no necesitamos ni convendrían? Cuba está conquistando su independencia con el brazo y el corazón de sus hijos; libre será en breve plazo sin que haya menester otra ayuda.
Che:
No se puede confiar en el imperialismo ni tantito así, nada.
Maceo:
Una República organizada bajo sólidas bases de moralidad y justicia es el único gobierno que, garantizando todos los derechos del ciudadano, es a la vez su mejor salvaguardia… Inquebrantable respeto a la ley y decidida preferencia por la forma republicana, he ahí concretado mi pensamiento político.
Che:
Vamos a pensar caminando, vamos a aprender creando y también, por qué no decirlo, equivocándonos. Estoy seguro que muchas veces nos encontraremos con que estamos fuera de la senda, pero eso no será sino en contados momentos y podremos tomar el buen camino con una mayor dosis de experiencia. Todos nosotros, y el pueblo con nosotros.