
Aunque no acumulan energía, permiten reducir en horas del día el uso de combustible diésel importado que, al haber disponibilidad, puede destinarse a los motores de la generación distribuida para las noches y madrugadas.
No es posible, y nadie ha dicho que los psf eliminarán los apagones, y también mienten quienes corren la falsa información de que Cuba no tiene una estrategia en su sistema eléctrico, pues precisamente el cambio de matriz energética es parte de ella.
Con la reciente inauguración del parque solar fotovoltaico ubicado en la zona Juan Pérez II, en el municipio de Niquero, provincia de Granma, suman dos los terminados en abril y totalizan diez desde que comenzaron a funcionar estos emplazamientos en febrero.
Los primeros psf fueron el de Escuela de Enfermería en El Cotorro, La Habana y Alcalde Mayor, en Abreus, Cienfuegos, cuya puesta en marcha fue en el segundo mes del año.
En marzo empezaron a funcionar los de La Sabana, en Granma; Mango Dulce, en Artemisa; Remedios, en Villa Clara; La Corúa, en Holguín; Jovellanos, en Matanzas y Ciego Norte (Cruce de la trocha), en Ciego de Ávila.
Durante Abril, quedaron en funcionamento La Barbarita, en Consolación del Sur, provincia de Pinar del Río y Juan Pérez II, en el municipio de Niquero, provincia de Granma.
Situación eléctrica
El déficit de capacidad de generación provocará que por el mediodía la afectación sea de 780 MW y en la máxima demanda alcance 1185 MW, según la comunica la Unión Eléctrica en redes sociales.
Se proyecta una disponibilidad de 2035 MW y una demanda de 3150 MW, lo que generaría un déficit de 1115 MW, pero la afectación estimada será de 1185 MW porque hay 70 MW que son una reserva para operar el sistema.
Ayer se afectó el servicio las 24 horas con una máxima de 1587 por una demanda superior a la prevista, sin que tampoco hubiera podido evitarse el déficit en la madrugada.
Los parques solares fotovoltaicos aportaron en los momentos de iluminación 940 MWh.