No recuerda exactamente si estaba en quinto o sexto grado, pero fue junto a sus padres, llevaba una pequeña bandera cubana, acompañada de un “plumerito” blanco en las manos, la cabeza cubierta por una pachanguita a la que estaba ceñida una cinta con la fecha Primero de Mayo, y lo que más la impresionó fue la alegría y cantidad de personas que había reunidas en la calle Martí.
Esos son los recuerdos que atesora Katia Guerra Rivera de la primera vez que desfiló en el Día Internacional de los Trabajadores, asegura que nunca más faltó a esa cita, ya fuera con sus papás, los muchachos del barrio o del Comité de Base de la UJC, incluso siendo madre adolescente concurrió con su pequeña.

Cuando inició la vida laboral cambió la perspectiva, pues como trabajadora del Centro de Elaboración de la Empresa Municipal de Gastronomía de Pinar del Río era ella entonces quien confeccionaba maracas, carteles, “plumeritos”, la que buscaba cómo diferenciarse dentro del bloque, con una conga o con pancartas o lemas, fue ahí que comenzó su trayectoria como dirigente sindical.
Recibió preparación en varios centros y cursos como parte de la cantera de jóvenes talentos de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), inició su adiestramiento en la Esfera de Asuntos Laborales y Sociales que en aquel entonces dirigía Rubén Lloga Sixto, actualmente secretario general de la organización en la provincia.
Desde sus nuevas funciones hubo otro cambio de perspectiva: “no es lo mismo participar en un desfile que estar dentro del equipo que organiza uno. Hay que motivar a los distintos colectivos, cada sector tiene sus características, pero cuando termina, y todo sale bien, te embriaga el regocijo.”
En su condición de delegada del Poder Popular durante más de 20 años contribuye a estas marchas desde la comunidad “convoco a las amas de casa, jubilados, a que participen en el desfile, que se sumen con sus familias o en los centros que trabajaban.”
Como secretaria general del Sindicato de los Trabajadores de la Industria Alimentaria y la Pesca en la provincia se implica desde otra visión, determinar cómo estructurarse, que la ubicación de cada entidad sea un reconocimiento a los resultados y puntualiza que quienes cierran no son los peores, porque si es importante un buen comienzo, también es esencial un excelente cierre.
“Vamos con mucho fervor, con todo el altruismo revolucionario que caracteriza al sector, hay mucha entrega en los trabajadores de la industria alimentaria y la pesca desde el panadero hasta el pescador, vamos con ese amor a darlo todo en este Primero de Mayo.”
Confiesa que siente un inmenso placer en ser dirigente sindical, en representar a los trabajadores, “exhorto a la juventud que se involucren con el movimiento obrero, que estudien y aprendan, ¿Cómo surgió nuestra Central de Trabajadores de Cuba? ¿Quiénes fueron los líderes que estuvieron al frente de ella? ¿Cómo ha sido el transcurso hasta llegar a este 22 Congreso?”
Les insta a acercarse al hecho que mientras la fecha en el mundo está marcada por protestas, en Cuba es de celebración y no porque no existan problemas pendientes de solucionar y carencias, sino para patentizar la unidad y es esa una razón por la que asegura que cuando no desempeñe funciones como dirigente sindical seguirá participando en esa fiesta que son los desfiles.
“Y vamos a hacer que la calle Martí de nuestro municipio cabecera retumbe, con los cientos y cientos de trabajadores que representamos, porque: Por Cuba, juntos creamos.”
Acerca del autor
Licenciada en Periodismo (1995 Universidad de Oriente). Trabajó como periodista en Tele Cristal (Holguín) hasta marzo del 2003, directora y guionista de televisión.
Periodista del semanario Guerrillero (Pinar del Río) desde mayo del 2003 hasta la actualidad, corresponsal del semanario Trabajadores en esa provincia desde septiembre del 2020.
Creadora audiovisual y cinematográfica independiente.




Katia, excelente ser humano, trabajadora, madre de familia y dedicada a sus responsabilidades tanto en lo social cómo en lo político. ejemplo a seguir.