Icono del sitio Trabajadores

Llanos de Oriente: El inicio de una recuperación

Las Tunas.— “Estos pollitos son el otro amor de mi vida”, lo afirma con palabras y lo demuestra con sus desvelos cotidianos María Josefa Torres Espinosa, quien aplica sus experiencias de 47 años de trabajo en la unidad empresarial de base (UEB) Llanos de Oriente.

 

El amor y la entrega son esenciales para atender a los pollitos en la etapa de inicio. Foto: Ángel Chimeno Pérez

 

“Soy operadora agropecuaria especializada y me desempeño como criadora de aves”, dice sin apartar la vista y el corazón de esos animalitos: “Esos pollitos se tratan como niños en cuna. Tienes que darles un buen manejo de temperatura, asistirlos diariamente, moverlos, si están durmiendo despertarlos para que coman…”.

Así piensa y actúa también otra trabajadora de nave, Alicia Ávila Correa, quien desde hace 10 años se dedica a similares menesteres. Ella insiste: “la higiene y la alimentación son fundamentales”, y asegura que no puede explicar sus sentimientos cuando un pollito muere, “es inevitable, no por mal manejo, sino por malformaciones congénitas”.

María Josefa y Alicia están muy contentas, porque “a pesar de todos los problemas económicos del país, el Estado garantiza el alimento y las medicinas para atender la masa avícola”.

El comienzo

La Doctora en Ciencias Veterinarias Claudia Breffe Oliveros, jefa técnica de la unidad, enfatiza que recibir a los animalitos con un día de nacidos implica cuidados extremos, principalmente después de su traslado desde provincias como Holguín, Camagüey, Santiago de Cuba, Villa Clara o Artemisa.

Breffe Oliveros detalla que en los primeros días de enero recibieron 80 mil 826 crías desde Camagüey y cumpliendo los protocolos de seguridad fueron distribuidos en seis naves, que en conjunto tienen una capacidad para 124 mil 800 pollitos, donde son atendidos con mucho esmero por trabajadores que ya son expertos en esta actividad.

“En condiciones de calentamiento permanecen 14 días, tiempo en el que reciben, además, los medicamentos esenciales, fundamentalmente, antibióticos en los primeros días y las vacunas según sus categorías. Aquí los atendemos durante 56 días y luego pasan a otra unidad en la que se garantiza el desarrollo”, detalla la especialista.

La preparación de la fuerza

Aunque la inmensa mayoría de los trabajadores está distinguida por larga data de labor y prevalece el sentido de pertenencia, “realizamos todos los meses acciones de capacitación, de preparación y actualización de conocimientos con la participación del colectivo, para evitar que las rutinas provoquen descuidos y estos, a su vez, afectaciones en la crianza”, remarca Breffe Oliveros.

En esos encuentros abordan temas de bioseguridad, las principales regulaciones del manejo, y enfatizan en el calentamiento; las enfermedades y el uso de medicamentos nuevos o alternativos, “porque en ocasiones no disponemos de los productos específicos, pero se usan otros similares”, confirma la doctora.

No obstante, “este año hemos trasladado dos lotes a unidades de desarrollo que a los 56 días cumplían los requisitos de peso y talla en un 92 y 95 por ciento, respectivamente, que clasifican en categoría A, de primera, según las exigencias”, certifica Luis Enrique Sosa Aguilera, el director de la UEB, cuyo liderazgo es reconocido por el colectivo en el propósito de alcanzar los valores de eficiencia planificados.

Sosa Aguilera insiste en que el inicio de ponedoras es una actividad técnica muy exigente que requiere conocimientos, amor, entrega y mucha responsabilidad, en función de lograr que las aves alcancen los parámetros establecidos para su paso a la etapa de desarrollo, y cuya calidad es garante de la producción de huevos.

Más allá de los pollitos

Tanto Sosa Aguilera como Luis Miguel Reyes Gutiérrez, secretario general de la sección sindical, y sus compañeros de labor, miran optimistas el futuro y procuran la diversificación de sus producciones.

Y hablan entusiasmados de la crianza de codornices, la vaquería, el autoabastecimiento, el ganado ovino y el proyecto de apicultura, como actividades que auguran nuevos éxitos a la unidad

Compartir...
Salir de la versión móvil