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Mientras las aguas bajan

Liusmara Rodríguez Soriano, presidenta del Consejo de Defensa Municipal (CDM) de Mantua, considera que en la tarde de este miércoles las aguas del río, que lleva igual nombre que el poblado, retomen a sus niveles habituales, tras una crecida, que a juicio de los locales no vivían hace al menos unos 20 años.

 

En la comunidad Mangos de Roque la crecida del río Mantua bordeó varias viviendas e inundó a otras. (Foto de Pedro Paredes Hernández)

Fueron 31 las viviendas inundadas de la comunidad Mangos de Roque, ubicada en la propia cabecera, los pobladores se evacuaron hacia casas de familiares y amigos y protegieron sus pertenencias; justamente hasta el portal de la morada de Lourdes Llera Corrales se desbordó el cauce, asegura que estuvo toda la madrugada mirando a través de la persiana, lo que más le preocupa ahora son los daños a largo plazo porque esa humedad daña las paredes, provoca hundimiento en el piso.

Ella y su esposo seguían atentos a los excesos del río Mantua y comentaron con el equipo de reporteros que llegamos hasta allí que habían alertado a personas que desde el otro margen estaban caminando por zonas inundadas, incluso abogaron porque se adoptara algún tipo de medida, especialmente porque algunos eran adolescentes, a los que sus padres debían impedirles tal proceder.

El actuar irresponsable de la población en situaciones de peligro puede tener trágicas consecuencias. (Foto de Yolanda Molina Pérez)

En el municipio ninguna escuela sufrió daños en su estructura, por lo que esperan no haya inconveniente para el inicio del curso escolar el próximo lunes cuatro de septiembre.

En cuanto a la red de instalaciones de la economía una escogida y una bodega perdieron fibras de sus cubiertas, pero pocas y recuperables con los medios del territorio, resaltó que no el tabaco acopiado, ni los productos de la canasta familiar normada almacenados, respectivamente, en dichas unidades tuvo menoscabo.

Deben esperar por que las inundaciones cedan para evaluar el impacto sobre la agricultura,la penetración del mar en el asentamiento costero de Arroyos de Mantua fue ligera y en horas de la tarde del martes arribó al territorio una brigada de linieros procedentes de Matanzas para iniciar las labores de recuperación de la red eléctrica, aunque sólo se contabilizaba la caída de 10 postes, fueron suficientes para dejar sin servicio a todo el municipio.

Las labores de saneamiento en el poblado iniciaron apenas las condiciones climatológicas lo hicieron posible. (Foto de Dorelys Canivell Canal)

Con diferentes alternativas como uso de grupos electrógenos y de carbón se aseguraban prestaciones básicas como el expendio del pan y elaboración de alimentos en la gastronomía.

Tampoco hubo que lamentar daños en la red de consultorios del médico y la enfermera de la familia, y en cuanto a las viviendas están activadas las oficinas de trámites en cada consejo popular, pero preliminarmente no se agravó el estado actual del fondo habitacional.

 

Ya llegó la primera brigada de linieros, procedentes de Matanzas, para iniciar las labores de recuperación del servicio eléctrico (Foto tomada de internet)

Entre los atributos de los que se enorgullecen los mantuanos, está el ser reconocidos como uno de los poblados que distingue por la pulcritud de sus calles y espacios públicos, la recogida y limpieza ya empezó en este norteño municipio que no ha esperado por que las aguas retomen su nivel para dar inicio a las tareas de recuperación.

 

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