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Me encargué a mí mismo llevar esta Guagua por el rumbo de los preparativos del inicio del curso escolar el lunes 4 de septiembre, pero de forma novedosa y yo mismo expresé mis dudas de qué presentar a bordo de este trayecto.
Me dije:
Tienes que buscar algo nuevo para no decir lo mismo que se escribe todos los años desde 1959.
Me respondí:
¡Qué voy a decir que no esté dicho ya en 64 años, en los que lo raro sería que uno de esos cursos no se pudiera empezar!
Me repliqué:
Pues tienes que escribir de eso porque es de los hechos más importantes en los cuales es difícil encontrar una familia que no esté relacionada con el inicio del curso escolar, porque en Cuba todos tienen un amigo, un familiar o alguien que trabaje en el sector educacional o sea alumno de un nivel de enseñanza.
Buscando no tener que cumplir el encargo, me volví a contestar:
¿Y tú crees que después de dos años de pandemia al que le siguió un curso que trató de recuperar la normalidad tenga algo nuevo que no sea recordar que el período lectivo pasado ya se dedicó a volver a basarse en la presencialidad sin olvidar lo bueno del uso de medios virtuales?
Esas palabras fueron aprovechadas por mí para el remate:
Acabas de decir algo nuevo: este curso que está a pocos días de comenzar será el de continuidad del anterior y es decisivo para volver al calendario de siempre… Sal y busca qué se proponen no solo los maestros, porque eso no se decide únicamente en el aula, sino que todos los trabajadores del sector son importantes para restablecer el calendario.
Cuando mi otro yo, pareció intentar volver a negarse, fui concluyente:
Y no vayas a decirme que no hay historias que contar de heroísmo cotidiano que no es el de desafiar balas y cañonazos, sino el de mantenerse firmes en el puesto de trabajo con los enredos del salario, la falta de transporte, el desabastecimiento de materias primas, alimentos y medicinas…
Empieza ahora mismo a buscar cómo lo hacen y cuáles son las motivaciones, que seguramente son patrióticas porque patriota dice cualquiera que lo es cuando hay de todo, pero los afiliados al Sindicato Nacional de Trabajadores de Educación están ahí firmes, indaga cómo viven y cómo están preparando el curso, porque ya están en las aulas.
En resumen: tuve que empezar a replegarme y me propuse yo mismo redactar esta sección con una solicitud a los lectores para que me apoyen con datos y argumentos para escribir próximos materiales sobre los preparativos, inicios y desarrollo del curso escolar 2023-2024.
Los criterios, sugerencias y todo cuando deseen, pueden escribirlos debajo de este material en
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Mi muy querido Paquito: lo nuevo que tenemos para este curso escolar es hacer la asignatura con más participación de los estudiantes en el diseño y más orientada a su aplicabilidad profesional y, por tanto, más significativa para ellos. Nos proponemos obtener productos resultantes de un enfoque por tareas que, junto con la autoevaluación, constituirán la evaluación integral de la asignatura. Cada producto supondrá el aprendizaje de un programa informático, como medio de aprendizaje y exposición de conocimientos y habilidades adquiridos.
Esto me ha quedado muy técnico, pero lo que aspiraba era a contarte del entusiasmo por cambiar y mejorar lo que hacemos Estoy segura del éxito porque en el empeño tengo de pareja a un profesor recién graduado con muchas ganas de hacer. Mi abrazo y buenos deseos a todos los docentes que buscan el desarrollo del pensamiento, la creatividad y la participación en las mejoras de nuestra vida. Te abraza, tu vieja maestra. N.b. Gracias a ti, por tu trabajo y tú pasión.
Tal vez la principal novedad siga estando en conservar la universalidad educativa; actualizada cada año con una perfección técnica profesional siempre en espiral.
Este año escolar podría beneficiarse del énfasis político que se imprime institucionalmente para involucrar y responsabilizar a los factores del municipio, al delegado, al diputado, a las administraciones locales, a las empresas de todo tipo para que contribuya a mejorar las condiciones «materiales» de cada centro escolar enclavado en su radio de acción.
La parte metodológica en el arte de enseñar conocimientos, ética, valores programáticos nace nacionalmente con una mayor exigencia, rigor por la calidad educativa; que ninguna familia sienta la necesidad de pagar por «repasadores», quienes casi siempre están bien conectados, informados y dotados de los programas educativos así como de sus principales insuficiencias al aplicar los programas educacionales. Mejorar la preparación de los directivos en cada escuela para que asuman la calidad en la enseñanza y ética profesional. La perfección material siempre ayuda a crear una ética de coresponsabilidad.
En ello parece importante liberar a los educandos de los constantes lamentos de algunos profesores sobre sus pesares personales, algunos exceden límites, incluso hay quienes escamotean la merienda llevada por el alumno desde la casa. En fin se impone seguir siendo novedoso al resistir el bloqueo imperial; pero a la vez sostener nuestra aspiración del avance cualitativo en lo material y en lo didáctico, lo metodológico. Tampoco nada nuevo como idea pero no generalizada en cada centro educacional.
Gracias.