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Cargando...A la altura del kilómetro 10 de la carretera a La Coloma, saliendo de la ciudad de Pinar del Río, hay un camino al lado izquierdo, si se adentra en él llegará a la comunidad El Sitio, asentamiento en el que Ian depositó toda su furia la noche del 27 de septiembre del pasado año; de las 136 viviendas del caserío, 62 se derrumbaron y 70 tuvieron pérdidas totales o parciales de los techos.
La magnitud de los daños impuso una manera diferente de enfrentar la recuperación, la máxima dirección de la provincia encomendó al sistema empresarial de la Agricultura, que cuenta con 30 entidades en el territorio, asumir la reconstrucción y reparación de las moradas e infraestructura socio económica.
A menos de un año fueron concluidas 56 de las 62 viviendas que clasificaron como derrumbes totales, las restantes se encuentran en ejecución, emplearon la tipología IV, zapata, hiladas de ladrillos como base, madera y cubierta de zinc, la mayoría de los beneficiarios, admiten que sus nuevos hogares son más sólidos y confortables que los que perdieron.
Mayra Casanueva Rodríguez, delegada de la circunscripción, señala que los pobladores se incorporaron al proceso de recuperación, lo que representó un beneficio añadido para esas familias, pues al ser contratados por las empresas, tuvieron una fuente de ingresos.
“Mi papá, un primo mío y yo hicimos esta casa”, comenta Duniesky Gómez Casanova, propietario del inmueble, padre de tres niñas y uno de los residentes que devengó un salario mientras construía su vivienda, al igual que los familiares que le ayudaron en la faena, expresa su gratitud al colectivo de la Unidad Empresarial de Base (UEB) de Suministros Agropecuarios de Guane, entidad que estaba a cargo de la ejecución.
Asimismo, reconoce el acompañamiento de las máximas autoridades de la provincia y a todos los que de una forma u otra hicieron posible que ya tenga un hogar, añade que la forma de retribuir es trabajando más, para que este país salga adelante.
Mayibis Rivera Áreas, su esposa, recuerda que se quedaron prácticamente sin nada, confiesa que no pensó tener una casa como la que tienen ahora y también patentizó su agradecimiento por la ayuda recibida.
Al reconocer el esfuerzo realizado por las entidades involucradas, Yamilé Ramos Cordero, integrante del Comité Central y primera secretaria del Partido en la provincia, hizo hincapié en la responsabilidad con que asumieron estas acciones y significó que incluso trabajadores damnificados estuvieron participando en la recuperación de “El sitio”, cuando todavía no tienen solución para sus viviendas.
Señaló que corresponde a los pobladores hacer un mejor uso de la tierra que está en los alrededores, muchas de las cuales permanecen improductivas.
La infraestructura social de la comunidad también tuvo notables mejoras, junto con la entrega de las casas se inauguró la panadería, centro que fue arrasado por Ian, y ya hace varios meses que el Grupo Empresarial Tabacuba concluyó la reparación de la escuela, el consultorio del médico y la enfermera de la familia y la farmacia. A ello se suma la bodega y la creación de un organopónico.
Transformar su asentamiento en un enclave productivo, vincularse a las actividades que hoy son una urgencia para el país, ayudará a que otros puedan disfrutar de la felicidad que ya ellos tienen, pues quedan miles de pinareños que todavía no logran resarcir los daños de sus viviendas.
