Ciego de Ávila.— Los aires que empiezan a refrescar el medio ambiente en el campo cubano no enfrían el tremendo calor humano que se siente en la surquería de la Empresa Agropecuaria Arnaldo Ramírez, del municipio de Primero de Enero, al nordeste de la provincia avileña.
Al rojo vivo, como el color de las tierras allí, se comportan las labores de la campaña de siembra de la temporada invernal. “Andando se quita el frío…”, decía una obrera nombrada Ana Julia, seguida, jolongo en mano, por otros trabajadores: Daisy, la joven Darelys y los demás integrantes de la brigada que laboran de sol a sol.
Ellos conforman la tropa de Maceo, el titán de la agricultura, director de la única empresa avileña que se acerca sin pérdidas económicas al fin del año 2022. Tal hazaña es fruto del día a día, pero esa entidad tiene la peculiaridad de que ese sea un logro con más de una década de tradición.
Como papa caliente
La campaña de siembra de frío está que arde. El mayor protagonismo lo tiene hoy la papa. Francisco Pérez Cervantes, director de Cultivos Varios en la empresa, informó que tienen el compromiso de plantar las simientes de este tipo de tubérculo en 325 hectáreas, más de 800 de frijoles y el resto del plan, hasta completar en febrero las mil 700, corresponden a yuca, maíz, col y otros cultivos, principalmente de ciclo corto, de esta campaña que reporta el 100,1 % de cumplimiento hasta la fecha en ese centro.
¿Cómo es posible ser eficiente con limitaciones de combustibles, energía eléctrica, fertilizantes y otros recursos para producir, sembrar más y avanzar hacia el 2023?
“Guapeamos y vencemos con alternativas propias como los medios biológicos y los abonos orgánicos, por ejemplo, aplicamos con frecuencia semanal 24 litros por hectárea de humus de lombriz; y la sistematicidad en las atenciones culturales a las plantaciones para lograr mayor población en los campos, entre otras acciones, afirma Jorge Maceo Lorenzo, director general de la empresa.
“Cuando usted observa un cultivo al que se le aplica abono orgánico se nota una diferencia entre el 20 y el 30 % en el estado vegetativo en relación con el que no se le suministra nada. La clave es no dejarse vencer o desanimarse por la falta de determinado insumo”.
Para el ingeniero agrónomo Carlos Blanco Sánchez, especialista del equipo de trabajo del Ministro de la Agricultura, “el colectivo de la empresa Arnaldo Ramírez tiene una experiencia admirable que se extiende a todo el país con la utilización de la lombricultura no solo como fertilizante, sino también en la protección contra los hongos”, destacó.
Un solo buey no hala
Al decir del refrán, esta empresa agropecuaria sola no podrá halar en Ciego de Ávila el programa de soberanía alimentaria y educación nutricional del que se habló recientemente en la Asamblea Nacional del Poder Popular.
Hace falta enyuntar también a las demás empresas, con vistas a no solo salir de las pérdidas económicas superior a los 180 millones de pesos concentrados en ocho entidades del sistema de la agricultura, sino también despegar en la siembra de la actual temporada de frío que hasta octubre pasado registraba el 86 % de cumplimiento, nada más en los granos se materializa lo planificado.
La entidad agropecuaria, cercana al poblado avileño de Violeta, es un reflejo de lo que planteara el Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez en las recientes sesiones del Parlamento cubano: El primer sistema que hay que fortalecer en cada municipio es la producción de alimentos con el menor gasto posible en divisas, aplicando la agroecología y generalizando estas buenas prácticas agrícolas.
