Los valores y aportes del Proyecto de Ley del Nuevo Código de Las Familias, y la consulta popular que se celebra hasta el 30 de abril, son reconocidos por noveles y experimentados docentes de las universidades cubanas.
Ania Caballero Leyva, profesora de Filosofía de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanísticas de la Universidad de Las Tunas, definió el proceso de consulta popular como un pleno ejercicio de la democracia.
El debate del Código es algo nuevo para el pueblo, en una circunstancia en la que asumimos la dirección del país, y la toma de decisiones colectivas es un ejercicio de contemporaneidad y hay que adquirir, necesariamente, la cultura del debate desde el conocimiento, dijo Caballero Leyva.
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Profesores y académicos de las Casas de Altos Estudios cubanas reconocen que la protección a la infancia y la adolescencia, recogidas en la versión 24 del nuevo proyecto ley, es uno de sus más importantes aportes.
Recientemente, durante un panel del Congreso Internacional de Investigadores sobre Infancias, Adolescencias y Juventudes, Ana María Álvarez-Tabío, profesora titular de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, señaló que la propuesta abraza un cambio radical en torno a la concepción de los niños y adolescentes como objetos de protección, vulnerables y necesitados, a partir de una visión paternalista, para convertirlos en sujetos activos de derecho con materialización efectiva.
El documento, afirmó, recoge elementos fundamentales para la vida social de los menores, que incluyen el respeto a su condición de persona en desarrollo, el destierro de su clasificación como sujetos incapaces, el reconocimiento de su autonomía progresiva y el derecho a la participación.
Dijo que Cuba asume este nuevo paradigma acorde con lo estipulado en la Constitución de la República y en la Convención de los Derechos del Niño, que incluye el interés superior de los infantes, su derecho a la identidad, a vivir y crecer en familia y la protección contra la violencia.
Para la consulta popular se han concebido en más de 78 mil puntos de reuniones, y además de los debates en todo el territorio nacional, un total de 109 circunscripciones especiales funcionarán en embajadas y oficinas consulares de Cuba en el exterior, para el proceso de consulta popular del proyecto del Código de las Familias.
(Tomado de ACN)