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Distingue la CTC con la condición de Proeza Laboral a profesores de la Educación Especial

La Central de Trabajadores de Cuba (CTC) distinguió este jueves con la condición de Proeza Laboral a los docentes de la Educación Especial José Carlos Cánovas, Esther Fernández, Yunisleidys Perdomo, Milagros González y Beatriz Santiesteban, con motivo del  aniversario 60 de esa enseñanza en Cuba.

 

 Foto1: La escuela especial Dora Alonso,  que atiende las necesidades educativas especiales de niños con trastornos del espectro autista, que sirvió de sede al acto central, fue inaugurada por el propio Fidel Castro un 4 de enero, 20 años atrás, y la misma se incluyen entre los colectivos premiados por su consagración y resultados. Foto: Ariel Ley Royero/ ACN

 

Los reconocidos por la CTC recibieron tal distinción atendiendo a su destacada labor como teleprofesores cuando la pandemia obligó a interrumpir las clases presenciales y ellos continuaron impartiendo los contenidos del plan de estudio a los alumnos de la Educación Especial y orientando a sus familias en todos los niveles educativos.

También Beatriz Roque Morales, directora nacional de esa enseñanza en el Ministerio de Educación, recibió del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, la Ciencia y el Deporte el Sello Conmemorativo por el aniversario 60 de su creación.

 

Beatriz Roque Morales, directora nacional de la Enseñanza Especial recibe el Sello Conmemorativo por el aniversario 60 de esa educación, de manos de Niurka María González Orbera, secretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Ciencia, la Educación y el Deporte. Foto: Ariel Ley Royero/ ACN

 

La entrega de estos y otros reconocimientos tuvo lugar en la capitalina Escuela Especial Dora Alonso, en Ciudad Escolar Libertad, donde hoy aconteció el acto central por las recién cumplidas seis décadas de esa educación especial, obra de inmenso humanismo y cuyo artífice fuera el Comandante en Jefe Fidel Castro.

De fruto genuino de la Revolución por su espíritu solidario y humanista calificó Roque Morales la que, más que un tipo de educación, constituye en Cuba todo un sistema de instituciones, servicios, modalidades de atención, soportes profesionales, recursos y vías de extensión, a disposición de las personas con necesidades educativas especiales, sus familias, los docentes y la comunidad.

Si al triunfo de la Revolución el país apenas contaba con ocho escuelas, una veintena de docentes y poco más de un centenar de educandos, hoy dispone de 344 centros de este tipo, con una matrícula de cerca de 32 mil 500 alumnos y 14 mil 565 profesionales para atender sus necesidades educativas especiales.

 

Foto3: Esther María La O Ochoa, pedagoga de excelencia con 55 años de ejercicio profesional en la Educación Especial y de estos más de 30 como directora de la escuela «Solidaridad con Panamá», recibió de la Organización de Pioneros José Martí la Condición Aniversario 60 Haciendo Historia. Foto: Ariel Ley Royero/ACN 

 

Aun cuando existe este tipo de escuelas, corresponde a la familia decidir si hace uso de ese servicio. De no optar por este, corresponde a la Educación Especial, con sus recursos especializados, preparar a la escuela regular y desde ahí actuar también para entre todos garantizar una educación de calidad y contribuir al adecuado tránsito del alumno por el sistema de enseñanza, su formación integral, el pleno desarrollo de sus potencialidades y una participación activa en la sociedad, señaló.

La directora nacional de Educación Especial en el MINED significó el quehacer extensionista de las escuelas especiales, que las convierte en centros de recursos y apoyos para la atención en cualquier contexto, incluidos hospitales y salas de pediatría y los propios hogares, en el caso de niños imposibilitados de asistir a las aulas.

 

 Ena Elsa Velázquez Cobiella, ministra de Educación, hace entrega de reconocimiento. Foto: Ariel Ley Royero/ACN

En la Educación Especial hay asignaturas específicas, de acuerdo con la discapacidad y orientadas a corregir, compensar y a facilitar los procesos de inclusión, pero, aunque con adaptaciones, las escuelas especiales toman como base el currículo general de cada nivel educativo, de ahí que, llegada la hora del tránsito, la inserción en la escuela regular ocurra de modo natural, refirió.

Añadió que eso explica, además, cómo durante los momentos más duros de la pandemia los alumnos de dichos centros hayan podido seguir desde sus hogares las actividades docentes televisivas correspondientes al grado que cursan, acompañadas de orientaciones a la familia por esa y otras vías de información e intercambio.

Roque Morales habló también de los retos, porque no todo está hecho y logrado. El III Perfeccionamiento del Sistema Nacional de Enseñanza constituye una herramienta para seguir avanzando en pos de una educación cada vez más inclusiva y de calidad, a pesar del genocida bloqueo imperial, que en el caso de una educación como esta, ya de por sí costosa, todo lo encarece y dificulta aún más.

La directiva del MINED felicitó a los trabajadores de la Educación Especial, agradeció su entrega, su altruismo, ese amor que todo lo puede, por sus alumnos, por Cuba, por la Revolución y su obra de justicia y equidad.

Presidieron el acto nacional por la celebración Liudmila Álamo Dueñas, vicejefa del Departamento de Atención al Sector Social del Comité Central del Partido Comunista de Cuba; Ena Elsa Velázquez Cobiella, ministra de Educación; y Martha del Carmen Mesa Valenciano, presidenta de la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de la Asamblea Nacional del Poder Popular. (Con información de ACN)

 

 

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