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Fallecimiento de Julio Reyes Álvarez: una pérdida muy sensible para el movimiento sindical (+ Fotos)

El Sindicato Nacional de la Educación, la Ciencia y el Deporte calificó como una pérdida muy sensible para el movimiento sindical el reciente fallecimiento del compañero, amigo y hermano de lucha Julio Reyes Álvarez. Maestro de alma y corazón, graduado de la Escuela Normal de Santiago de Cuba. Colaborador del Movimiento 26 de Julio. Fue Decano del Colegio Nacional de Maestros Normales y Equiparados en Holguín.

Participó en la organización y desarrollo de la Campaña Nacional de Alfabetización en el oriente del país, en una zona muy intrincada de difícil acceso.

Tuvo una amplia trayectoria como dirigente sindical; fundador del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Enseñanza (SNTE) ocupando diferentes responsabilidades desde su creación, entre ellas: Secretario General de Oriente Norte y años más tarde resultó elegido como Secretario General del Sindicato Nacional de la Educación y la Ciencia en el IV Congreso (1977) y reelecto en el V Congreso (1982). También fue dirigente de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en la zona de Holguín.

Bajo su dirección el Sindicato tuvo una participación muy activa en la aplicación del Plan de Perfeccionamiento del Sistema Nacional de Educación, en el trabajo educativo en las instituciones infantiles, en la actividad deportiva y la investigación científica, así como en la vida orgánica de la organización sindical, en la batalla del sexto grado y en la emulación socialista. Trabajó en la selección y atención de los integrantes de los contingentes de maestros internacionalistas, esencialmente los de Nicaragua y Angola. En este período se adecuó la estructura sindical en correspondencia con las transformaciones de las estructuras administrativas y el reordenamiento económico, razones que motivaron la creación de los Buroes sindicales y se entregó por primera vez la Distinción Rafael María de Mendive.

Al culminar su labor en el Sindicato fue designado como Jefe del Departamento de América Latina en la Federación Sindical Mundial (FSM).

Fue delegado al Primer Congreso del Partido Comunista de Cuba (1975) y Diputado a la II y III Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular (1981 al 1993). Participó en varios Congresos de la CTC.

Obtuvo diferentes condecoraciones y reconocimientos, entre ellos: Medalla Jesús Menéndez, Medalla de la Alfabetización y la Distinción Rafael María de Mendive.

Su enseñanza y ejemplo ha quedado en el corazón de cada dirigente sindical de la Educación, la Ciencia y el Deporte que le conocieron, lo cual demuestra que los hombres mueren, pero su legado continúa.

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