Cargando...Sancti Spíritus.- Como si quisieran cumplir al dedillo lo que le había pedido Alfredo Despaigne horas antes, los Alazanes de Granma se soltaron a batear en el cuarto juego de la final de la 60 Serie Nacional y no pararon hasta propinarle nocao 15-5 a los Cocodrilos de Matanzas, con lo cual quedaron a una sola sonrisa de levantar su tercera corona beisbolera en los últimos cinco años.
Renner Rivero volvió a ser la carta yumurina para un cuarto pleito que siempre define mucho el devenir de los play off, pero el derecho no pudo pasar del segundo inning y esta vez no fue victima del descontrol, sino de una fuerte ofensiva que no paró hasta fabricar racimo de cinco carreras, a pesar del auxilio del primer relevista Joel Suárez.
En la lomita contraria, Yoel Mojena se encargó de cumplir lo solicitado por su entrenador de pitcheo, Ciro Silvino Licea: “camina hasta el quinto o sexto mezclando tu recta y rompimientos en los dos ángulos de salida que tienes”. Y el derecho de Bayamo lo cumplió a tal punto que sorteó seis entradas impecables, con cuatro ponches, cuarteto de boletos e igual cantidad de sencillos.
El joven Guillermo García disparó el primero de sus dos jonrones en el quinto ante un Suárez que estaba muy lejos de sus mejores actuaciones de cuartos y semifinales, de ahí que saliera hacia las duchas en el sexto capítulo, tras darle pelotazo a Roel y bolear gratis a su primo Raico.
El apagafuegos Armando Dueñas tampoco encontró el plato y concedió dos pasaportes gratis más, mientras el estrenado Leandro Hernández terminó se sacar el tercer out y ya el marcador olía nocao, aunque los yumurinos descontaron una, la de la honra, gracias a metrallazo al centro de Yariel Duque en el final del segundo tercio del juego.
Entonces hizo su aparición el agua, y luego de una hora y 22 minutos, al reanudarse las acciones, los maderos de los Alazanes sentenciaron el pleito con un fogón de seis anotaciones, en las cuales volvió a ser protagónico Guillermo García con otro cuadrangular, ahora por el jardín izquierdo.
A pesar del terreno mojado y ventaja de 14 cartones, el relevista Juan Danilo Pérez fue vapuleado en el llamado inning de la suerte con cuatro carreras, pero finalmente cayeron los tres outs y los Alazanes de Granma festejaron un éxito que vale un campeonato.
Moralejas del partido:
– Aunque la explicación del mentor Armando Ferrer aclaró que fue iniciativa de Ariel Sánchez un toque de bola increíble en el tercer capítulo con dos hombres en base, sin out y perdiendo por cinco, la jugada clasifica de lo peor que hemos visto en esta final, solo comparada con el toque de Roel Santos en el tercer partido.
– Carlos Benítez comentó a este redactor que Despaigne le habló, vía telefónica, a los muchachos en el mitin y les corrigió a muchos jugadores lo que estaban haciendo mal, al tiempo que los llamó a dejar la ansiedad. Osvaldo Abreu (5-2), Carlos Benítez (3-3), Guillermo García (5-4) y Yulián Milán (5-2) así lo atestiguaron en una ofensiva que no paró hasta los 16 imparables.
– Yoel Mojena había dominado a Matanzas en la clasificatoria con la misma receta de ahora. Se le vio tirar por arriba del brazo y a ratos con un ángulo de salida por el lado que hizo quedar mal a más de un bateador yumurino.
– El slump ofensivo de los Cocodrilos no se trata de un promedio (31 hits en 135 turnos para 248), sino de bateadores claves que no han rendido como Erisbel Arruebaruena y Eduardo Blanco, así como la pobre oportunidad de otros, con la excepción de Ariel Sánchez.
– La teoría del zurdo vs. zurdo vuelve a desmoronarse con Guillermo García, que lleva de 11-7 en la final, a pesar de que no alineó el primer encuentro contra Yoanni Yera, algo que sí hará este viernes en el quinto y posiblemente decisivo juego del título.
– Los cambios en el orden al bate realizados por Carlos Martí rindió un provechoso fruto. Mantuvo a Benítez como cuarto, pero subió a Guillermo García al sexto y bajó a Iván Prieto al octavo. Aquí cabría el refrán: “más sabe el diablo por viejo, que por diablo”.
– En más de 40 play off de la pelota cubana, jamás un equipo con un balance 3-1 ha perdido la corona. Granma además impondría una marca bien difícil de igualar: en todas las finales que ha clasificado ha sido campeón: de 3-3, (56, 57 y 60 Serie)
– Lázaro Blanco vs. Yoanni Yera es el remake del primer enfrentamiento. El granmense va por imponer récord de promedio de ganados y perdidos (6-0) e igualar la mayor cantidad de victorias en un play off, que está en poder del pinareño Yosvani Torres con seis.
Acerca del autor
Máster en Ciencias de la Comunicación. Subdirector Editorial del Periódico Trabajadores desde el 2019. Editor-jefe de la Redacción Deportiva desde 2007. Ha participado en coberturas periodísticas de Juegos Centroamericanos y del Caribe, Juegos Panamericanos, Juegos Olímpicos, Copa Intercontinental de Béisbol, Clásico Mundial de Béisbol, Campeonatos Mundiales de Judo, entre otras. Profesor del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, en La Habana, Cuba.
