Educadores en tiempos de COVID

Educadores en tiempos de COVID

1 Estrella2 Estrellas3 Estrellas4 Estrellas5 Estrellas (Sin valoración)
Cargando...

Atrás han dejado la familia y el terruño que los vio nacer y crecer, y por estos días ya no andan entre alumnos y rodeado de útiles escolares en el Instituto Vocacional de Ciencias Exactas Vladimir Ilich Lenin; convertido desde abril del pasado año en un centro de aislamiento, primero para pacientes sospechosos de padecer la COVID-19 y más recientemente a quienes resultaron positivo al test de antígenos.

Círculo infantil Juana Azurduy de Padilla. El cumplimiento de las condiciones higiénicas es una prioridad en estas instituciones que todos los días reciben a sus niños. Foto: Agustín Borrego

Ricardo Pérez Montejo, director de la prestigiosa institución, está orgulloso de sus trabajadores, de los cuales casi la totalidad mostraron desde el principio disposición para apoyar la tarea de estos tiempos: el combate contra esta pandemia.

Así alrededor de 12 maestros que integran el contingente de profesores del oriente del país decidieron permanecer en el centro, renunciaron a regresar a sus hogares y laboran aquí día y noche, en la llamada zona verde, lo mismo en tareas de mensajería y otros servicios, limpieza de áreas y guardias para proteger los bienes y recursos de la escuela, así como en la custodia del personal de salud y pacientes.

Ha sido muy positiva la respuesta —continuó Ricardo— y cuando ha llegado el momento ellos también han entrado a la zona roja, realizando disímiles actividades.

Zulema Guisado, de la provincia de Las Tunas, Leandro Milanés, de Granma, Osmeiky Osorio, Eliazar Dip, Yovany Rosales y Yury Goulet, de Santiago de Cuba, son algunos de estos valientes educadores, quienes consideran que la única opción ha sido la asumida por ellos durante esta etapa.

El directivo señaló que, de 136 docentes, solo 13 por razones de salud se mantienen laborando a distancia, pero en función de la atención a los estudiantes, tarea que cumple todo el claustro por las vías establecidas, sobre todo por las redes sociales, y en apoyo a las actividades televisivas.

De igual manera, subrayó el quehacer de los trabajadores no docentes, entre estos el personal de la cocina-comedor, quienes tienen la responsabilidad de elaborar los alimentos, y los de mantenimiento, que con frecuencia traspasan la frontera y entran a la zona roja para reparar desperfectos en el alumbrado o las redes hidráulicas.

De la provincia a un municipio

Por estos días atareada más que de costumbre, la directora provincial de Educación en La Habana, la máster Yoania Falcón Suárez, precisó que más de 16 mil trabajadores del sector (incluido el personal de apoyo a la docencia) participan en el territorio en actividades relacionadas con el enfrentamiento a la COVID-19.

Primaria Jesús Hernández Alfonso, ubicada en el consejo popular Eléctrico. La nueva normalidad impone también medidas de seguridad para evitar el contagio con la COVID-19. Foto: Agustín Borrego

Comentó que además de la Lenin, la Escuela Formadora de Maestros Eduardo García Delgado, ubicada en el municipio de Boyeros, también funciona como un centro de aislamiento, así como las 11 villas de profesores, las cuales se preparan con vista a estar a plena capacidad para la atención de pacientes y viajeros.

Yoania resaltó la labor de los colectivos en la prestación de servicios, ya sea en las cocinas-comedores, en el lavado de la ropa, y en las tareas de higienización, y también mencionó que otro personal se ha vinculado a las farmacias y se encarga de llevar las medicinas a los ancianos y personas vulnerables.

Otorgó gran importancia a la labor que desarrollan los llamados teleprofesores, quienes trasmiten saberes necesarios según los niveles y tipos de enseñanza y además expresó que algunas escuelas y círculos infantiles continúan reparándose.

Al exponer sus criterios sobre el quehacer de los trabajadores en estos tiempos, la directora municipal de educación en Arroyo Naranjo, Yaisma Hernández Martínez, manifestó que una labor esencial para los docentes ha sido la autopreparación teniendo en cuenta la importancia de visualizar las actividades televisivas, y así estar en condiciones de esclarecer dudas y preocupaciones de alumnos y padres, respecto a los contenidos impartidos.

Según las indicaciones del consejo de defensa municipal también han apoyado el trabajo en las oficodas y en el Sistema de Atención a la Familia (SAF), trasladando alimentos a las personas vulnerables y ancianos.

Foto: Agustín Borrego

En el territorio 11 escuelas primarias abren sus puertas cada mañana (una por cada consejo popular), para atender y acompañar a los escolares cuyas familias están incorporadas a las tareas de la economía y los servicios. Sobre los círculos infantiles, afirmó que los 18 con que cuenta Arroyo Naranjo también permanecen activos.

Educación, un quehacer interminable

Mucho ha variado la dinámica de los círculos infantiles desde que apareció la COVID-19 en nuestro país. Así lo corroboró Marbelis Aguilera Barrientos, directora del círculo infantil Juana Azurduy de Padilla, ubicado en el consejo popular Eléctrico (del municipio ya mencionado), instituciones escolares que han continuado brindando servicios a pesar de la actual situación epidemiológica.

Los padres ya no entran al círculo —aseveró Marbelis—. La enfermera recibe a los niños en la puerta, les toma la temperatura y luego las seños lo recogen, les lavan las manitos y empieza la jornada con las actividades previstas. ¡Algo fundamental es que no se quitan los nasobucos!, mientras más pequeños mejor lo llevan.

Algo similar ocurre en las escuelas primarias, donde asisten aquellos pequeños cuyos padres han continuado trabajando en medio de la actual pandemia. Muchos, precisamente, lo hacen en sectores como Salud Pública, Educación, o pertenecen a las Fuerzas Armadas Revolucionarias y al Ministerio del Interior.

Tal es el caso de la escuela Jesús Hernández Alfonso, la única en ese consejo popular que abre todos los días. Su director Marlon Monzón Díaz contó que allí se ha reorganizado el claustro (cuenta con 43 docentes), de manera tal que los maestros no siempre coinciden al mismo tiempo en el centro.

Foto: Agustín Borrego

Una prioridad ha sido la visualización de las actividades televisivas (según los grados que atienden), lo cual realizan en su propio hogar siempre y cuando no tengan ese día que asistir a la escuela. Ello forma parte del trabajo a distancia, de la autopreparación que realizan para luego estar en condiciones de esclarecer cualquier duda a los niños y a las familias.

Aquí la jornada laboral comienza a las 7:30 am y concluye cuando en la escuela ya no queda un solo niño, quienes durante el día realizan varias actividades docentes y de juegos.

“Hemos tenido que poner en práctica nuevas estrategias, no solo para que el maestro se prepare, sino para ayudar a la familia, por eso creamos una serie de materiales con vista a atender a los alumnos con dificultades, al margen de que los docentes mantienen un estrecho vínculo con los padres a través de las redes sociales”, enfatizó Marlon.

Carmen Lina Morales Vázquez, coordinadora general de esta escuela primaria, aseguró que en tiempos de COVID-19 han desarrollado muchísimas acciones. “Una esencial ha sido la de garantizar la continuidad de estudios de los alumnos, así como apoyar a la familia para que cuente con una orientación en base al contenido que se brinda en la actividad televisiva”.

Consideró que se ha desarrollado una fuerte labor metodológica con los maestros, sobre lo que ellos deben planificar de acuerdo a lo que se imparte, y así reforzar el proceso docente-educativo, que por las actuales condiciones ya no ocurre, mayoritariamente, de manera presencial.

Para esta destacada maestra, graduada en la formación emergente, ya con 20 años de experiencia, en el actual período se ha mantenido el vínculo escuela-familia-comunidad. “Si los médicos merecen una medalla por cuidar y preservar la salud del pueblo, los maestros son merecedores de un reconocimiento, pues enseñar a través de los medios audiovisuales —y utilizar otras vías como las redes sociales— resulta bien complicado, y ello no ha dejado de hacerse”.

Compartir...

Escribir comentario

© 2018 Trabajadores. Órgano de la Central de Trabajadores de Cuba
Director: Alberto Núñez Betancourt
Subdirectores Editoriales: Alina Martínez Triay y Joel García León
Territorial y General Suárez. Plaza de la Revolución. La Habana, Cuba. CP: 10698
Fax: 053 (7) 555927 E-mail: digital@trabajadores.cu