Los diarios gambianos The Point y Daily News publican íntegramente la intervención del ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, en el segmento de Alto Nivel de la Conferencia de Desarme, en la cual denunció la inclusión de la isla caribeña en la lista espuria de EE.UU. de países patrocinadores del terrorismo.
A páginas completas, y en el caso del Daily News con llamado a portada, ambos cotidianos de esta nación del occidente africano destacaron las palabras del diplomático cubano, quien calificó de acto cínico e hipócrita que el gobierno del exmandatario Donald Trump haya calificado a Cuba como Estado promotor del terrorismo, el pasado 11 de enero.
Rodríguez Parrilla afirmó que tal determinación del derrotado régimen de Trump tiene como propósito imponer obstáculos adicionales a cualquier perspectiva de avance en las relaciones entre Washington y La Habana.
Seguidamente instó a la nueva administración de EE.UU. del presidente Joe Biden a revocar esa absurda e injustificada decisión.
Acorde con los cotidianos gambianos, el jefe de la Diplomacia cubana expresó que el escenario internacional es cada vez más peligroso y desafiante, y más que nunca está en riesgo la propia supervivencia humana.
Agregó que la paz y la seguridad internacionales se ven amenazadas por conflictos; guerras de rapiña y no convencionales; actos de agresión e intentos de cambio de régimen; y por una carrera armamentista que dilapida enormes recursos indispensables para el desarrollo sostenible de nuestros pueblos.
Rodríguez señaló que las múltiples crisis generadas por la devastadora pandemia de la COVID-19 han mostrado la fragilidad de un mundo donde no se garantiza el acceso universal a servicios básicos de salud, mientras se modernizan y amplían los arsenales nucleares y se fortalece su papel en doctrinas militares de defensa y seguridad, que continúan amenazando a la humanidad.
El Canciller de la isla caribeña enfatizó que se impone el fortalecimiento del multilateralismo y el respeto irrestricto a los propósitos y principios de la Carta de la ONU y del Derecho Internacional. La convivencia pacífica entre las naciones exige que los gobiernos se abstengan de ejercer presiones sobre otros, y de aplicar injustas medidas coercitivas unilaterales, aseveró.
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