Cargando...La Revolución alcanzó otra victoria y lo hizo con las nuevas generaciones y con mucho de su música, de poesía, de discurso, de consignas, de compromiso… y también con su Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez, quien no podía dejar de “estar con nuestro pueblo, con nuestros jóvenes, en el 50 aniversario de la Federación Estudiantil de la Enseñanza Media”.
Precisamente a ellos, que desde horas tempranas se dieron cita en el capitalino parque Benito Juárez, agradeció el mandatario por haber salido a la calle en estos días “a manifestarse en contra de las burdas, vandálicas y perversas amenazas que ha tratado de imponer el imperialismo yanqui, que tienen que ver mucho con el anhelo de siempre de destruir nuestra Revolución”.
La repentina presencia del Jefe de Estado fue recibida con ovaciones y vivas a la Revolución y a Fidel, a quien como dijo Díaz-Canel “no lo recordamos, Fidel vive siempre”. En su intervención dejó claro que “cuando pensamos en proyectos de desarrollo no pensamos en divisiones entre revolucionarios y no revolucionarios, sino para todo el pueblo”.
Reiteró que ese nunca va a ser el proyecto de los anexionistas, pues estos quieren un país donde haya una pequeña clase media que sea la que viva bien explotando a la mayoría, y perderíamos todas las conquistas sociales, como la educación y salud gratuitas, la asistencia social y el bienestar social.
“Se trata, entre otras cosas, de hacer lo que están haciendo ustedes como estudiantes, manifestándose, denunciando, tomando las calles para que nadie se equivoque, dialogando, debatiendo con los que tengan una idea confusa. Incluso, con los que tengan ideas contrarias a las nuestras vamos a debatir, vamos a discutir y ver quién tiene la razón. Se trata de darles espacios a todos los jóvenes porque la Revolución se hizo ante todo para los jóvenes”, afirmó.
Entonces recibió intensos aplausos de quienes allí se habían congregado también para celebrar el aniversario 56 de las Brigadas Técnicas Juveniles. Todos juntos defendieron una causa común desde el amor que nos une a Cuba, desde las convicciones y principios a los que jamás renunciaremos.
