Hacía meses que solo se veían a ratos, conversaban más por teléfono que en vivo, se ocupaban más de proyectos familiares que de llegar temprano a los ensayos; leían, escuchaban música y compartían información sobre la Covid-19… Esa ha sido la vida en casi cinco meses del grupo Buena Fe hasta que este 6 de octubre por fin se reunieron y salieron los acordes.
Desde un garaje, y liderados por Israel Rojas y Yoel Martínez, se dejaron escuchar las emociones del reencuentro, los deseos de estar ya en concierto, los planes para octubre de una agrupación que suma ya 21 años en escena, y entre los planes no faltó el cumpleaños del percusionista David Hernández el día 30.
Fue este martes una transmisión diferente. El acostumbrado Facebook Live dejó ver la familia que siempre ha sido Buena Fe, con temas musicales del disco Carnal afilando sus ganas para salir a buscar sus seguidores. Y las caras de Ernesto Cisneros (pianista), Maikel Pérez (batería), Yibrán Rivero (guitarra), Israel López (bajo) y David Hernández (percusión) lo decían todo. «¡Por fin, juntos, por fin, volver a ensayar, por fin, arrancar la banda!»
Los temas Madurar y Patakí de Libertad sonaron a media máquina e Israel Rojas lo advirtió: “estamos calentando motores para salir a nuestras giras cuando se pueda, cuando la Covid-19 se porte mejor, como va pasando por estos días, a pesar de la situación en las provincias centrales”.
Desde un garaje se asomó la vecina, hubo chistes de los utileros del Grupo y hasta Yoel sacó el pomo con cloro para no dejar olvidada la higiene. Hacía meses que solo se veían a ratos, pero en estos 16 minutos de grabación todos se volvieron a reencontrar con el Buena Fe que más disfruta su público: desenfadado, feliz, optimista, lleno de canciones y cubano hasta la médula.
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