La “paternidad” de la salsa sigue siendo el pollo del arroz con pollo de numerosos debates musicológicos, pero lo que nadie pone en duda son los aportes inmensos de Cuba a la conformación de un género (hay quien habla de una actitud ante la vida) con el que bailan ahora mismo millones de personas en América Latina y el resto del mundo.
Mucha salsa y de la buena sonará desde el 25 de febrero en el Club 500 del complejo recreativo José Antonio Echeverría, La Habana, el nuevo escenario del Festival consagrado a esa expresión en Cuba, que se extenderá hasta el primer día de marzo.
Basta con revisar la nómina de orquestas y solistas: Los Van Van, Manolito Simonet y su Trabuco, El Noro y 1ra. Clase, Paulito FG, NG la Banda, Havana D´Primera, Adalberto Álvarez y su Son, Pupy y los que Son Son, Maykel Blanco y Salsa Mayor, Bamboleo, El Niño y la Verdad, Haila Mompié, Juan Guillermo, Tania Pantoja, Eliades Ochoa, el Septeto Santiaguero…
No estarán todos los que son… pero todos los que están, son.
Esa ha sido la pretensión del equipo organizador de la cita, encabezada por Maykel Blanco: que se pueda disfrutar de un verdadero maratón de conciertos con las más populares agrupaciones del Cuba que honren la salsa independientemente de sus tendencias.
No significa, obviamente, que se le dé la espalda al debate teórico, el Festival cuenta con un programa de conferencias y clases magistrales; pero lo principal será disfrutar de buenas propuestas para el público bailador, justo en tiempos en que se suele repetir que la salsa ha perdido terreno ante expresiones de lo que se suele englobar bajo la etiqueta de “música urbana”.
La cuestión no es excluir, sino de reafirmar los valores de esta música popular bailable.
Los resultados del Festival de la Salsa en ese sentido han sido palpables, como le dijo al portal CubaSí Maykel Blanco:
Es “el primer festival que despuntó, el que dio los primeros pasos y comenzó a traer DJs, bailarines del mundo, a escenarios cubanos. Creo que, en ese sentido, el Festival de la Salsa rompió la inercia, y es una característica que hoy todavía se mantiene. Además, la participación de tantas agrupaciones en un término de cuatro o cinco días. Yo creo que al Festival de la Salsa lo que lo caracteriza es la alegría, la cubanía y lograr reunir tantos amigos de tantos lugares del mundo”.
El gran atractivo de esta edición será la presencia del cantante puertorriqueño Víctor Manuelle, que tendrá a su cargo el concierto de clausura.
“Estoy ansioso, es la primera vez que voy a ir a Cuba a hacer música, porque ya he tenido la oportunidad de visitarla. Ustedes no saben el respeto, la admiración que hay por Cuba no solo de Víctor Manuelle sino de esta tierra (Puerto Rico)”, ha escrito el músico en sus redes sociales.
Se sumarán artistas y profesores de bailarines de otros países de América y Europa.
“Dada la repercusión que ha tenido el evento en diferentes países, hay empresarios que se han interesado por hacer una sociedad con los organizadores del Festival de la Salsa en Cuba y tenemos idea de extenderlo este año a Perú, México y Colombia” —adelanta Maykel Blanco, que está convencido de la buena salud de la salsa.
Compara el Festival con los niños: “uno los ve nacer y está todos los días ahí, en la lucha, y a veces no nota cómo van creciendo; pero sí me imaginé que un día tuviéramos un festival como el que tenemos hoy, y estoy muy contento con eso”.Blanco
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