Así acentuaron en el Pleno del Comité Provincial de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), en Cienfuegos.
Ramón Barreras Ferrán
Los próximos meses de noviembre y diciembre resultarán decisivos para mejorar los indicadores económicos principales, terminar el año con una situación más favorable que la existente y el muy necesario cumplimiento de los planes.
En el último Pleno del año 2019 del Comité Provincial de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) subrayaron además, que en diversas entidades no resulta favorable, hasta la fecha, el comportamiento de los indicadores de empleo y salario, y persisten pagos sin respaldo productivo, entre otros aspectos negativos.
Especial atención le dieron a la situación que presentan empresas comerciales, gastronómicas y de servicios personales, pues algunas de ellas tienen notables incumplimientos del plan de ingresos, y constituyen ya una vergüenza financiera, como la correspondiente al municipio de Abreus y la de Gastronomía en el de Cienfuegos, sin que las medidas adoptadas den los resultados esperados.
En tal sentido, se convocó a la realización de asambleas de representantes en las que se analicen, fundamentalmente, la circulación mercantil y los sistemas de pago, porque además de cierto inmovilismo, en los colectivos persiste desconocimiento de lo establecido y orientado.
La pregunta: ¿Qué más puede hacerse?, formulada por Minerva García Olivera, secretaria general de la CTC en ese territorio, suscitó un grupo de intervenciones que coincidieron, sobre todo, en la necesidad de una mayor influencia proactiva de los trabajadores y las direcciones sindicales.
Armando López Vinent, miembro del Buró Provincial del Partido, señaló que la situación económica del país impone retos significativos, los cuales precisan que los cuadros logren una mayor preparación. “La CTC y los sindicatos deben analizar los asuntos de una manera diferente”, indicó.
Isdalis Rodríguez Rodríguez, miembro del Secretariado de la CTC, al intervenir, instó a fortalecer el papel sindical en función de la materialización de los compromisos en la producción y los servicios, además de afrontar con inteligencia y voluntad en cada colectivo laboral las limitaciones que impone el bloqueo imperialista contra Cuba.
