Con el triunfo 7-1 sobre Santiago de Cuba, los nuevos Gallos espirituanos, guiados por Yankiel Mauri desde la lomita en ese último juego, concretaron la remontada de una semifinal en la que empezaron debajo con su mejor carta de pitcheo y en la cual el invitado más indeseable fue el error: 11 entre ambas formaciones.
No obstante, los visitantes en el Guillermón Moncada sacaron a relucir una de sus principales armas: la ofensiva, para clasificar a su segunda final de la sub-23, que tiene previsto su inicio para este martes en casa de los dirigidos por Eriel Sánchez, anfitriones de Cienfuegos, exitoso en la otra semifinal ante los monarcas defensores, Isla de la Juventud.
Los líderes de los grupos B y C en la etapa clasificatoria protagonizarán por vez primera la discusión del título entre equipos del centro del país, en tanto un nuevo campeón emergerá, pues las mejores faenas de los espirituanos ocurrió en el 2015 con plata —detrás de La Habana—; mientras los sureños archivan como su lugar más destacado el bronce del 2018.
Lejos de dar un favorito, se presagia un play off bien peleado, pues los Elefantes de la Perla del Sur tienen hoy una de las escuadras más integrales en cuanto a pitcheo-ofensiva-defensa; al tiempo que Sancti Spíritus apelará más a los maderos para levantar la corona, pues su principal carta del box, Roberto Hernández, ha sido llamado para representar a Cuba en la venidera Liga Can-Am.
La serie está pactada a cinco desafíos. Los dos primeros en el estadio José Antonio Huelga y desde el viernes los tres restantes, de ser necesarios, en el imponente 5 de Septiembre.
