Por: Tubal Páez Hernández
Como parte del examen del cumplimiento de los objetivos de trabajo en las distintas esferas de la labor interna de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), este jueves se analizó el trabajo realizado en el 2018 por la Secretaría de este órgano, en el cual participaron Esteban Lazo Hernández, Ana María Mari Machado y Miriam Brito Sarroca, presidente, vicepresidenta y secretaria, respectivamente, del parlamento cubano.
La Secretaría tiene, entre otras funciones, las de auxiliar, tramitar y controlar los asuntos que deben ser considerados por los diputados y por la Asamblea Nacional; redactar, conservar las actas, atender el archivo central, las quejas y solicitudes de la población, y velar por el funcionamiento de los órganos locales con apego a las leyes y reglamentos vigentes.
En consecuencia, se pasó revista a los resultados de las cinco áreas bajo la dirección de la Secretaría: Información y Análisis, Organización y Planificación, y las que atienden Órganos Locales, Comisiones y la Población.
Brito Sarroca explicó que en la etapa se garantizaron los aseguramientos logísticos para el desarrollo de los períodos ordinarios y extraordinarios de la Asamblea Nacional, en especial los de la Sesión Constitutiva y el proceso de Reforma Constitucional que implicó la aprobación de la nueva carta Magna en diciembre último.
Sobre el Programa de Perfeccionamiento del Poder Popular, que en las dos últimas legislaturas ha estado guiando el trabajo, Lazo Hernández señaló que es más necesario y determinante en este momento histórico y, en consecuencia, indicó pensar desde ahora qué conceptos y acciones deben variar a partir de los cambios de estructura contenidos en la nueva Constitución.
Los participantes en el balance, al cual también asistieron los trabajadores de las áreas, se detuvieron en las visitas integrales de la Secretaría a los territorios, que en el caso de las provincias fueron a 13, incluida la Isla de la Juventud, a 85 municipios y a 170 consejos populares, cifras que quedaron por debajo de las planificadas por distintas razones, lo cual fue compensado con la utilización de videoconferencias.
En relación con el funcionamiento de los consejos de la administración, se insistió en el papel que les corresponde en el desarrollo económico y social de los municipios, y que deben actuar más sobre las entidades del territorio; al respecto el presidente del Parlamento cubano señaló que debe darse desde una mirada de control respetando sus funciones y autoridad.
El también miembro del Buró Político opinó que no se ha logrado del todo que esos consejos en realidad funcionen como un órgano de la administración y alertó que este no es una empresa, pues sucede que muchos de los asuntos considerados corresponden realmente a las entidades económicas y de servicios; por tanto, resulta fundamental el papel del presidente de la Asamblea Municipal en esto.
Se debatió también acerca de la importancia de elevar la disciplina de los representantes del pueblo en las distintas instancias en cuanto a la asistencia a las sesiones de los órganos del Poder Popular y de sus comisiones de trabajo.
Miriam Brito Sarroca también se refirió a los trámites de los planteamientos, opiniones y quejas de los electores, proceso que enfrenta insuficiencias relacionadas con la calidad y término de las respuestas; falta de registros de los casos recibidos en las entidades administrativas, informes poco profundos presentados a los consejos de administración y consejos de dirección que asumen el análisis de los problemas desde una visión estadística más que desde planos valorativos.
En este sentido se refirió a las comprobaciones de las oficinas de atención a la población, a la capacitación del personal y a las condiciones de los inmuebles destinados a ese fin.
Finalmente, la Secretaria de la ANPP enumeró las 24 proyecciones de trabajo para el próximo año, etapa en la que Esteban Lazo Hernández señaló que “terminó un año y empezó otro para el cual debemos prepararnos y ante el cual crecernos”. Relacionado con esto, al inicio del encuentro había indicado la necesidad de preparar y capacitar a los diputados acorde con la intensa labor legislativa que requerirá la implementación de la nueva Carta Magna.
