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Las alegrías que guían un desfile obrero

Para Lídice es un orgullo poder desfilar este Primero de Mayo y demostrar que Cuba y sus trabajadores siguen firmes. Foto: De la autora

Trabajar durante más de 30 años en el mismo sector hace crecer algo grande dentro de ti; te forja algo llamado compromiso. Lídice Sánchez Morejón es de las que cree eso.

Ella labora en la cadena hotelera Isla Azul en Camagüey, en el departamento de Recursos Humanos. Hace unos días en agradecimiento a sus años de labor recibió la distinción Elpidio Sosa, que para ella fue un regalo y un incentivo para seguir ahí, en su puesto de trabajo, aportando al país y recibiendo a los clientes con la mejor sonrisa.

Y es que como explicara Lídice, “este sector es un espacio que forma y profesionaliza, es la locomotora sin humo que ayuda a la Revolución.

“Cada vez que un cliente se va satisfecho, patentizamos eso que nos enseñó Fidel, un legado que nos dejó y que nunca debemos obviar si queremos seguir teniendo Revolución y desfilando con alegría cada Primero de Mayo”.

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