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Me apasiona hacer por los demás

La diputada Estrella asegura que el éxito en la vida está en ponerle el corazón a todo lo que se haga. Fotos: Noryis

Cuando  aceptó ser delegada de circunscripción, lo único que tenía claro era su vocación de hacer por los demás, algo que la ha apasionado siempre y la seguirá apasionado, dice con una sonrisa que le ilumina el rostro.

La noche de su nominación como representante del barrio, Estrella Patricia Sánchez Berrio , solo tuvo tiempo para decir “Sí, estoy de acuerdo”, un consentimiento que jamás pensó sería respaldado en las urnas, aquel día en que sus vecinos decidieron que ella podía ser una excelente delegada de la Asamblea Municipal de Poder Popular en Cárdenas.

Entonces, recuerda, vino una época difícil. “Atender lo mejor posible a mis electores, pero también a mis afiliados”, precisa, mientras monta una de las mesas del restaurante del hotel Meliá Las Antillas, la instalación de Varadero donde dirige el Buró Sindical.

“Desenvolverme en dos funciones tan exigentes han hecho de mí una persona más disciplinada. Tenía que comenzar por organizar el tiempo que dedicaría a cada actividad. La planificación me ha salvado”, sonríe, mientras camina rápidamente hacia otra de las mesas.

“Ponerle siempre el corazón a lo que hago”, asegura que ha sido su fórmula triunfadora, virtud que vieron ella quienes la propusieron como candidata a diputada al Parlamento cubano.

“Ha sido de mis mayores alegrías. Nunca imaginé algo así”, confiesa con la emoción que no puede esconder. “Solo el hecho de ser propuesta me llenó de satisfacción. Era  el reconocimiento a un desempeño que sé que debo mejorar, pero al que le he puesto todas las ganas que tengo…”.

Lejos estaba de imaginar lo que vendría después. “El día que supe que era diputada, lloré mucho de la emoción y hasta sentí un poco de miedo por lo que representa pertenecer a una instancia que es el órgano supremo del poder del Estado.

“Ahora a prepararme más, me dije, porque si estoy a ese nivel, debo hacer quedar bien a los que votaron por mí, y a mis compañeros de trabajo. Tendré esa doble responsabilidad, ser voz de mis vecinos y de mis afiliados”.

Estrella se convirtió  así en la única empleada cubana de la  internacional Meliá que integrará la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), honor por el que ya fue reconocida por los máximos representantes de la mencionada cadenada.

La estructura de los 605 escaños de la ANPP la conforman 50 por ciento de delegados de circunscripción como Estrella,  y la otra mitad la componen personas destacadas de diferentes sectores de la vida económica y social.

Destacadísima también al frente del Buró Sindical, ocupación por la que ha ganado méritos que la han hecho trascender a ámbito de país y a la que se dedica con legítima pasión, “porque nada duele más que sentirse desamparado”, dice para referirse a la necesidad de estar siempre al lado de los afiliados, no importa si les asiste o no la razón. “A ellos nunca los dejo solos, esa es mi filosofía”.

Repite una y otra vez que sacarle tiempo al tiempo, planificarse, son palabras claves en su día a día, jornadas en las que cuenta las horas para reunirse con su nieto, como antes lo hacía cuando  su hija era muy pequeñita.

Junto con Estrella, otros dos matanceros de este estratégico sector,  Luis Martínez de Armas y Jorge Crespo Leicea,  formarán parte del máximo órgano de gobierno, tres yumurinos que junto a otros nueve empleados del turismo en todo el país integrarán desde el 19 de abril la IX Legislatura de la ANPP.

Delegada al XX Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba, las personas que apostaron por ella, esperan que, como en el sindicato del hotel Meliá Las Antillas, Estrella brille  también en su nueva función como diputada, algo que no duda conseguir porque su pasión es hacer por lo demás, y hacerlo bien.

Su hija y su nieto son el sostén de sus días.
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