Joel García
La Serie Nacional tiene enfrentamientos que arrastran multitudes por rivalidades históricas, jugadores emblemáticos o el morbo deportivo que generan situaciones particulares. La semana entrante reserva para el estadio Latinoamericano uno de los duelos más esperados en esta 57 edición: Matanzas-Industriales, con el primer enfrentamiento entre Víctor Mesa y su continuador en tierra yumurina, Víctor Figueroa.
Será esta la primera vez en los últimos seis años que el actual mentor azul no estará vestido de rojo, que será león y no cocodrilo: en tanto el mánager de los visitantes aprovechará los años a su lado como entrenador para robarle no pocas ideas, tácticas y jugadas. El pulso lo ganará el más inteligente y no el más aferrado a la fuerza, aunque ya sabemos que los juegos lo ganan los equipos y lo pierden siempre sus directores.
Deben esperarse marcadores cerrados y más de un batazo oportuno que libere tensiones, al tiempo que será necesario pensar en el mejor cuerpo de árbitros para esta subserie, con el fin de poner orden al mínimo roce o calentura que perfectamente puede suceder entre estas dos selecciones de miércoles a viernes.
Hasta el momento los dos Víctor ha sido exitosos en sus gestiones. El Matanzas de Figueroa archiva hasta el lunes 11 triunfos en 18 salidas, el de Mesa 11 en 17. La ofensiva favorece a los dueños del Latino (295 los azules por 286 los roji-blanco) y el pitcheo abridor es también mejor para los de casa por escasa diferencia, no así el del cuerpo de relevistas, que trabaja para 6,52 promedio de carreras limpias.
Más allá de llegar temprano al Latino, de sentarse por primera o por tercera, estaremos en presencia de una subseries que anima a disfrutarla con presumibles duelos entre Frank Montieth-Yoanni Yera o David Mena- Jonder Martínez, por solo mencionar dos de los tres que pudieran sucederse.
Finalmente, no puedo dejar de mencionar como un hecho bien curioso de la actual temporada, los tres jonrones con bases llenas en días consecutivos que le recetó Granma a Cienfuegos la pasada semana, dos ellos a la cuenta de Carlos Benítez, entusiasmado como casi todas las campañas con el madero.
