Carlos Martí: “No queda otra opción, ganar y ganar”

Tokio.- La sala de conferencia del estadio Tokyo Dome es un hervidero de periodistas japoneses, quienes pasan sus interrogantes a un conductor, encargado de realizarlas desde el centro de la fila de los colegas con impecable dicción. El director cubano, Carlos Martí, responde cada una con la amabilidad que no disimula el dolor por su primera derrota en el debut como mentor de un equipo Cuba en el IV Clásico Mundial de Béisbol.

“Debo empezar por reconocer que fue un gran partido de pelota. La ofensiva de Japón estuvo muy bien y el pitcheo nuestro no pudo aguantar en el quinto inning, cuando nos hicieron un racimo de cinco carreras. Luego, los muchachos reaccionaron y se fueron acercando al marcador, pero no supimos remontar la ventaja corta y las dos más que nos hicieron en el octavo significaron las clásicas puntillas, como decimos en Cuba”.

Así comenzó su valoración del encuentro el director granmense, para quien la derrota 11-6 también le dejó un sabor provechoso en cuanto a la reacción ofensiva del conjunto, tras una gira por Asia en la que no habían nunca conectado nunca la cantidad de hit que dieron este 7 de marzo.

“En ese aspecto sí estamos contento porque sabemos la calidad del pitcheo de Japón y nuestro equipo estuvo bien hoy en el bateo. Eso es muy positivo, porque nos da una idea que si le bateamos a ese pitcheo (que considero el mejor del grupo), el conjunto debe y puede seguir bateando en los partidos que vienen”, comentó.

Por supuesto, la pregunta inevitable llegó y sin calentarla mucho, el máximo responsable de nuestra formación en el evento soltó la idea: “No queda otra opción, ganar y ganar los dos partidos que nos restan, contra China y Australia. Confío en esas victorias y en que Cuba llegue a la segunda ronda como ha sucedido en los tres Clásicos anteriores”.

Sin titubear presentó a Vladimir Baños como el abridor frente a China este miércoles y ratificó a Lázaro Blanco contra Australia, mientras aseguró que se mantendrá idéntica la alineación regular, pues “por perder un juego de pelota no se pueden hacer cambios bruscos .Esto es un torneo muy corto y hay que estabilizar una alineación”.

Al contestar su valoración sobre algunos jugadores del equipo Japón y cómo apreciaba sus potencialidades declaró: “El tercero y cuarto bate (Aoki y Tsutsugoh) se ven que son jugadores de gran nivel, por la forma en que sacan el bate, la velocidad de swing. Ellos están por encima de la media del resto del equipo, el cual es de los mejores del torneo y no por gusto este país tiene dos títulos en el Clásico. Pude apreciar que cuentan con bateadores de tacto y fuerza, tienen un buen corrido en las bases y un pitcheo profundo”, aseveró.

En el turno a los colegas cubanos, no faltó entonces la referencia o preocupación por el relevo. “En sentido general nuestro pitcheo tiene que mejorar el control porque no puede permitirse esa cantidad de bases por bolas. No obstante, nuestros peloteros se crecen, lo han demostrado muchas veces y hay un buen ambiente en el dogout y los peloteros están en condiciones de luchar por el objetivo que traimos, avanzar a la segunda ronda”, dijo.

Sobre el papel de Despaigne en el partido, al prender la racha ofensiva en el séptimo, Martí expresó: “Contamos con él como la máxima figura de nuestro béisbol hoy. Ese batazo inspiró a la gente y ayudó al colectivo y esa queremos que siga siendo su función”.

Céspedes, un debut de ensueño

Casi antes de abordar el ómnibus de regreso al hotel, el jardinero Yoelkis Céspedes accedió a conversar sobre su estreno dorado en estas lides, a las que llega con apenas 19 años.

“Le doy gracias a los atletas y entrenadores que me apoyaron y me dijeron que cuando estuviera en home pensara solo que estaba jugando la serie nacional. Y eso fue lo que hice y salieron las cosas.

“El primer hit lo di con curva, los dos siguientes con recta. Aproveco además para agradecer la confianza que siempre me dado el director Carlos Martí y no quiero defraudarlo, como tampoco al pueblo de Granma.

“En Cuba no jugamos en estadio techados y es siempre impresionante estar en ellos. Por eso en los entrenamientos me voy primero que nadie para el jardín derecho a coger fly y a acostumbrarme al techo.

“Tuvimos una reacción positiva de la mitad de juego hacia delante. No ganamos, pero hicimos fuerza para ir arriba. En lo personal, esperaba el pitcheo de Japón más difícil, pero me resultó bateable.

“Espero sacar la cara por esos prospectos que dicen hay en este Clásico y ser el que más rinde, aunque aquí lo que más interesa es Cuba y pasar a la siguiente ronda”.

Acerca del autor

Joel García León

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Máster en Ciencias de la Comunicación. Subdirector Editorial del Periódico Trabajadores desde el 2019. Editor-jefe de la Redacción Deportiva desde 2007. Ha participado en coberturas periodísticas de Juegos Centroamericanos y del Caribe, Juegos Panamericanos, Juegos Olímpicos, Copa Intercontinental de Béisbol, Clásico Mundial de Béisbol, Campeonatos Mundiales de Judo, entre otras. Profesor del Instituto Internacional de Periodismo José Martí, en La Habana, Cuba.