La presencia femenina en los Destacamentos Mirando al Mar fue reconocida por Osmaida Hernández Cedeño, miembro del secretariado nacional de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) durante un intercambio con integrantes de esos destacamentos, que contribuyen con su labor a la tranquilidad y seguridad nacional.
Dijo que de los más de siete mil miembros de los destacamentos, tres mil son mujeres, lo que constituye casi un 35 % de esa fuerza. Resaltó que muchas ocupan el cargo de jefe de destacamento. “Queremos reconocer no solo el trabajo que voluntariamente realizan ellas en este noble empeño, el de salvaguardar nuestras costas y evitar que el flagelo de las drogas llegue a nuestro país y puedan dañar el futuro de nuestras hijas e hijos”.
Significó que en esta labor especial, coordinada por los Comités de Defensa de la Revolución, la misión es actuar de forma conjunta, sensibilizar en la importancia de que no solo sean hombres, sino las mujeres, quienes han demostrado a lo largo de más de cinco décadas que están dispuestas a defender la soberanía de la Patria y la Revolución.
Por su parte Julia Durruty Molina, miembro del secretariado nacional de los Comités de Defensa de la Revolución, manifestó que la actividad forma parte del balance anual de los Destacamentos Mirando al Mar y durante el programa se han realizado encuentros con aquellas organizaciones que trabajan de forma conjunta como la UJC y la FMC.
Expuso que en el país existen 306 destacamentos Mirando al Mar, y sus integrantes contribuyen en el cuidado de las costas. “Además han tenido participación directa en hechos de enfrentamiento a salidas ilegales y recalos de drogas, actúan sobre que aquellos que dañan y depredan la flora y la fauna marina. Lo hacen en condiciones difíciles en horario nocturno y diario, y todo eso sin descuidar el cuidado de la familia”.
Entre los más de 90 homenajeados estaba presente Maybel Fabelo, de Cienfuegos, quien desde hace un año integra un Destacamento, y en esa labor se ha sentido útil. “Son 10 hombres y soy la única mujer. Ellos me respetan y consideran. Por lo general, cuando me corresponde, hago la guardia de día. Para Catalina Perera este es un compromiso con la Patria, “porque no se puede permitir que nada dañe nuestras costas, son sagradas”.
